En los primeros quince días del año la inflación dio la sorpresa y se desaceleró a 3.69 por ciento a tasa anual, marcando así su nivel más bajo observado para una misma quincena desde 2019 y su menor nivel desde febrero del 2021.
De acuerdo con el reporte realizado por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), la inflación general en la primera quincena de enero fue de 0.20 por ciento quincenal y estuvo ligeramente por debajo de las expectativas del consenso de analistas.
Según el reporte, estas cifras estuvieron impulsadas por el aumento en las gasolinas, electricidad, mercancías alimenticias y vivienda, parcialmente compensado por la caída en tarifas aéreas y precios de frutas y verduras.
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La inflación subyacente; es decir, el índice que excluye los precios de la energía y los alimentos frescos y que, además, determina la trayectoria de los precios en el mediano y largo plazo, registró un repunte de 0.28 por ciento a tasa quincenal, mientras que a tasa anual registró un repunte de 3.72 por ciento.
De acuerdo con el departamento de Estudios Económicos de Banamex, este índice estuvo moderadamente por arriba de nuestra previsión y la del consenso , las cuales se ubicaban en 0.23 por ciento, y ligeramente mayor que su promedio histórico para la primera quincena de enero 0.26 por ciento.
En este sentido, explicó que se debió a que la inflación de mercancías fue de 0.49 por ciento, superior a su promedio histórico para esta quincena 0.46 por ciento, en contraste con la de servicios en 0.07 por ciento que se situó en línea con dicho umbral 0.07 por ciento.
A tasa anual, la inflación subyacente repuntó por las mercancías que registraron un crecimiento de 2.75 por ciento con incrementos tanto en el subcomponente de alimenticias como el de no alimenticias, en parte asociado a la actualización anual del IEPS a bebidas y tabaco. En contraste, la de servicios disminuyó a 4.82 por ciento, principalmente por menor inflación de servicios que excluyen educación.
“Estos resultados apuntan a un gradual cambio de tendencia entre los componentes de la inflación subyacente, a la baja para los servicios y al alza para las mercancías, como hemos anticipado”dijo.
Por su parte, los precios del índice no subyacentes, o el que contempla los precios más volátiles, registraron un retroceso de 0.04 por ciento quincenal, significativamente por debajo de la media histórica para una primera quincena de enero 0.81 por ciento.
Los costos de los productos agropecuarios registraron una caída de 0.99 por ciento quincenal debido a la reversión en el choque a los precios de frutas y verduras de meses previos de una caída de 2.67 por ciento, particularmente en el precio del jitomate y la cebolla, ya que los pecuarios subieron ligeramente 0.26 por ciento, en particular pollo y carne de res.
En tanto, los precios de energéticos y tarifas aumentaron en 0.70 por ciento quincenal, sobre todo por el incremento en los precios de gasolinas y el aumento estacional de inicio de año en algunas tarifas. A tasa anual, la inflación no subyacente se ubicó en 3.60 por ciento desde 4.91por ciento en la quincena anterior.
“Destacamos que los resultados de hoy muestran señales adicionales de un cambio gradual en la composición de la inflación subyacente que ya hemos anticipado, con una tendencia ligera a la baja, pero más consistente, en los servicios, y un incremento paulatino en las mercancías”, sostuvo la institución.
De esta manera, Banamex anticipó que la inflación mantenga una trayectoria gradual a la baja particularmente en los primeros tres trimestres del año, y mantuvo sus estimaciones para la inflación general anual y subyacente al cierre de 2025 en 3.8 por ciento y 3.7 por ciento, respectivamente, y para 2026 a 4.0 por ciento ambas.
En este sentido, Banco BASE concluyó en su análisis que se observa que el componente no subyacente muestra señales mixtas, ya que por un lado, las menores presiones en los agropecuarios, impulsadas principalmente por la caída en los precios de frutas y verduras, contribuyen a la desaceleración. Por otro lado, los energéticos muestran mayores presiones, debido al alza general en el mercado de materias primas y los ajustes al comienzo del año.
En tanto, Banorte explicó que la trayectoria a la baja de la inflación será el principal sustento para que el Banco de México (Banxico) proceda con recortes a la tasa de referencia de 25 puntos base en la siguiente reunión del 6 de febrero.
