El Indicador Oportuno de la Actividad Económica (IOAE) estima que el Indicador Global de la Actividad Económica (IGAE) tuvo una reducción de 0.1 por ciento en enero de 2022 respecto a diciembre de 2021, cuando se prevé un avance de 1.0 por ciento, informó el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
El organismo refirió que el rango calculado para el IGAE en el primer mes de este año va de una caída de 1.9 por ciento a un crecimiento de 1.6 por ciento respecto al mes previo.
Para los principales grandes sectores de actividad del IGAE, en las actividades secundarias (industria) se calcula un decremento mensual de 0.4 por ciento en enero y para las actividades terciarias (servicios) no se registró variación respecto a diciembre, con cifras desestacionalizadas.
En tanto, el IOAE estima un crecimiento del IGAE de 0.7 por ciento en enero de 2022 respecto al mismo mes del año pasado, con una tasa similar proyectada para diciembre pasado, con lo que ligaría 11 meses consecutivos al alza a tasa anual.
A tasa anual se estima un rango para el IGAE en enero que va de una contracción de 1.0 por ciento a un avance 2.5 por ciento.
Para los grandes sectores de actividad del IGAE se calcula un incremento anual de 2.1 por ciento en las actividades secundarias y en el sector terciario de 0.1 por ciento, con cifras desestacionalizadas.
El analista económico de Grupo Financiero Monex, Marco Arias, consideró que de materializarse las estimaciones del IOAE para enero de 2022, de un avance anual de 0.7 por ciento y una caída mensual de 0.1 por ciento, constituiría una buena noticia, pues a partir de otros indicadores se había generado el temor de que el declive en la actividad fuera mucho mayor.
Además, el dato proyectado para diciembre de 2021 tuvo una mejora notable, pues anteriormente se esperaba una nula variación mensual de 0.0 por ciento y ahora el estimado es de un crecimiento de 1.0 por ciento, que sería el segundo mejor resultado de los últimos 15 meses.
Así, el IOAE plantea un giro en la narrativa económica, pues a pesar de que durante los últimos dos meses se registraron fuertes repuntes en los contagios de COVID-19 por la aparición de la variante Ómicron en México y el mundo, la actividad en el país habría tenido casi nulas afectaciones.
KEFS