En julio de 2024, y con cifras desestacionalizadas, la actividad económica del país incrementó 2.0 por ciento a tasa anual y 0.6 por ciento a tasa mensual, de este modo superó las expectativas del Indicador Oportuno de la Actividad Económica (IOAE) y también del pronóstico de diversos analistas que esperaban un crecimiento menor.
Las actividades primarias, las secundarias y terciarias tuvieron aumentos a tasa mensual y anual, indicó el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), a través del Indicador Global de la Actividad Económica (IGAE).
Así, en el séptimo mes del año, a tasa anual, con cifras desestacionalizadas y en términos reales y por grupos de actividades, la agricultura y ganadería avanzaron 12.5 por ciento, las relacionadas con los servicios, 2.2 por ciento; y las de la industria, 0.6 por ciento.
El crecimiento a tasa mensual de las actividades primarias (agricultura y ganadería) tuvieron un crecimiento de 11.6 por ciento, las secundarias (industrias), 0.2 por ciento y las terciarias (servicios) crecieron 0.4 por ciento.
Para Grupo Financiero Ve por Más (Bx+) el repunte en el sector agro se dio por el aumento en la exportación agropecuaria y la manufactura de alimentos, y “posiblemente” porque la sequía ya no afectó a la agricultura y ganadería mexicana.
Respecto al comportamiento de las actividades industriales, el sector manufacturo se contrajo por la debilidad industrial de Estados Unidos, nuestro principal socio comercial, pero la construcción se reactivó por la edificación, aunque las obras civiles siguen con poco crecimiento.
Asimismo, los analistas de Bx+ destacaron que los servicios si tuvieron repunte, pero sólo en algunos sectores como transporte y educación o los recreativos, “posiblemente asociado por las elecciones” pero el comercio al menudeo y el alojamiento temporal tuvieron una caída.
Citibanamex, a través de su nota oportuna, destacó que la actividad económica mexicana “repuntó más de lo estimado, por arriba de nuestra proyección”; y que el crecimiento de la economía mexicana se explica por la “recuperación significativa de las actividades primarias, así como por los avances moderados en la producción industrial y los servicios”.
De acuerdo con la nota oportuna, la recuperación en los tres grupos de actividades aumentó en julio por el impulso que tuvo la construcción, 2.6 por ciento; minería, 1.4 por ciento; a pesar de las caídas en electricidad y gas, 0.9 por ciento y de la manufactura, 0.8 por ciento.
Los servicios también aumentaron mensualmente, luego de un estancamiento en junio, y destacaron el aumento en educación, 2.3 por ciento; actividades de gobierno, 1.6 por ciento; comercio al por mayor, 1.2 por ciento y los servicios de transporte y almacenamiento, 1.0 por ciento; aunque también hubo contracciones como esparcimiento, 21.3 por ciento; hoteles y restaurantes, 1.1 por ciento,
No obstante, los analistas indicaron que “a pesar del crecimiento de julio, el nivel de actividad promedio entre noviembre 2023 y julio 2024 se ubica por debajo del registrado en septiembre-octubre pasado, lo que ilustra la desaceleración de la misma observado desde finales de 2023”.
Citibanamex consideró que, ante el estancamiento de la demanda externa, la caída en generación de empleos, la contracción que se prevé para el gasto público y el elevado grado de incertidumbre que podría afectar las “decisiones de inversión”, mantiene su proyección de crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) para 2024 en 1.3 por ciento, “si bien el resultado de hoy sesga el balance de riesgos al alza”.
Por su parte, Gabriela Siller Pagaza, directora de Análisis Económico de Grupo Financiero BASE, sostuvo que el crecimiento a tasa mensual del IGAE se ubicó por encima de lo que se estimó en el IOAE que fue de 0.07 por ciento.
La analista pronosticó que si en agosto la actividad económica crece 0.34 por ciento y en septiembre se estanca conforme a las estimaciones del IOAE, el crecimiento del PIB en el tercer trimestre sería de 1.19 por ciento mensual y 1.40 por ciento a tasa anual, “acumulando en los primeros tres trimestres del año un crecimiento anual de 1.38 por ciento”.
En tanto que, Bx+ señaló que no prevé que existan las condiciones para que la actividad económica se acelere en el segundo semestre de 2024, pues los cambios en el marco institucional y la elección estadounidense sumarán incertidumbre en los meses siguientes.
Los analistas estimaron que el consumo privado será solido por el empleo y el aumento de los salarios, pero prevén que, de crearse menos empleos, y si la inflación y las tasas de interés se mantienen elevadas, el gasto será discrecional.
Sobre la inversión fija bruta, estimaron que, “continuaría desacelerándose conforme se sigue revirtiendo la expansión del año anterior en la obra pública. Además, la inversión privada sería frenada por la desaceleración económica, altos costos financieros, y la creciente incertidumbre asociada a las reformas constitucionales en el país y a la próxima elección presidencial en Estados Unidos”.
Ante ese panorama, los analistas consideraron que la economía mexicana tendrá un ritmo “semilento” de crecimiento y podrían ajustar su perspectiva del crecimiento del PIB para el cierre de 2024 y del próximo año.