La actividad industrial de México borró en abril las ganancias que había logrado un mes antes, al descender 0.5 por ciento en el cuarto mes del año, informó el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
Esto representó la mayor caída mensual de la actividad industrial desde diciembre del año pasado, cuando los sectores industriales del país retrocedieron 0.70 por ciento, señaló Grupo Financiero Banco BASE, quien destacó que, pese a esta caída, el Indicador Mensual de la Actividad Industrial (IMAI) se situó 6.50 por ciento por encima del nivel prepandemia (febrero de 2020).
Según los datos publicados ayer por el Inegi, el retroceso de la actividad industrial se debió a la desaceleración de tres de los cuatro sectores que comprenden el IMAI; que son minería; generación, transmisión, distribución y comercialización de energía eléctrica, suministro de agua y de gas natural por ductos al consumidor final (servicios básicos); construcción e industrias manufacturas.
Durante el cuarto mes del año, la construcción –clave para la economía por la gran cantidad de inversión que atrae– fue el único sector que tuvo un desempeño positivo, con un avance de 1.8 por ciento, además, con el dato de abril acumula dos meses al alza.
Al interior del sector constructor, todos los subsectores crecieron, siendo los avances más pronunciados los relacionados con la edificación, con 1.72 por ciento y los trabajos especializados para la construcción, con un repunte de 1.93 por ciento.
No obstante, el avance de la industria de la construcción no fue suficiente para contrarrestar las caídas de los otros tres sectores, de los que el manufacturero –uno de los más importantes para la economía mexicana y que representa 18 por ciento del PIB– retrocedió 1.5 por ciento mensual, siendo la primera contracción tras tres meses de buen dinamismo.
Su desaceleración se originó por el retroceso de 19 de las 21 industrias que lo conforman, de las cuales las mayores caídas se observaron en la fabricación de productos derivados del petróleo y del carbón (-11.56 por ciento); fabricación de insumos textiles y acabado de textiles
(- 8.50 por ciento); y otras industrias manufactureras (-5.06 por ciento).
En tanto, el sector minero también se contrajo a -0.34 por ciento en abril, pese a que los subsectores de minería de minerales metálicos y no metálicos, y el de servicios mineros crecieron 2.3 y 1.9 por ciento, respectivamente en el mes. La industria de extracción de petróleo disminuyó 1.2 por ciento en abril.
Cabe señalar que en su comparación anual y con cifras desestacionalizadas, el IMAI mostró un crecimiento de 0.63 por ciento en términos reales en abril pasado; sin embargo, esto significó una desaceleración frente a marzo, cuando en términos anuales creció 2.0 por ciento.
Por sector de actividad económica, en el último año, la construcción avanzó 12.6 por ciento y generación, transmisión, distribución y comercialización de energía eléctrica, suministro de agua y gas natural, 2.1 por ciento. En contraste, las industrias manufacturera y la minería cayeron 2.1 y 5.1 por ciento, respectivamente.
“La caída en las industrias manufactureras puede afectar las exportaciones y el empleo de México y, por otro lado, que el sector minero siga mostrando contracciones puede afectar la producción de materias primas, afectando a otros sectores”, agregó BASE.