Evitar el tránsito, las filas interminables para retirar y depositar dinero, así como realizar depósitos desde cualquier lugar donde estés son algunas de las comodidades que te brida realizar una transferencia interbancaria.
Para realizar dicha operación sólo necesitas conocer la Clave Estandarizada, mejor conocida como “CLABE”, la cual te permite darle mayor certeza y seguridad a las transferencias de un banco a otro.
Es importante señalar que estos dígitos no sustituyen el número de cuenta, de cheques o de tarjeta, tan sólo es una referencia adicional.
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¿Cómo está compuesta?
Tu CLABE se compone por 18 dígitos ordenados de la siguiente manera:
Código de tu banco: 6 dígitos
Número de cuenta del destinatario: 11 dígitos
Dígito de control o de verificación: 1 dígito
¿Dónde consultar tu CLABE?
La CLABE también es utilizada para pagar automáticamente servicios como el teléfono, agua, luz, etc, con cargo directo a una cuenta de cheques o a la tarjeta de débito a través del servicio “domiciliación de pagos”.
En tus estados de cuenta.
En tu banca en línea.
Tu Banco te puede decir cuál es tu CLABE interbancaria.
Para garantizar la seguridad y la en tus operaciones bancarias la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef) recomienda:
1.- Cuando realices un pago, asegúrate que la leyenda o motivo de pago sea la correcta para identificarlo.
2.- Si vas a recibir alguna cantidad por este medio, solicita al depositante que use una leyenda o motivo de pago para facilitar su localización.
3.- Considera el cobro de comisiones, puede variar de una institución a otra.
[caption id="attachment_1091533" align="alignnone" width="502"] Foto: @CondusefMX[/caption]
JVR
