El crecimiento económico en los países más pobres probablemente estará por detrás de las expectativas prepandémicas durante años, dadas las brechas en las tasas de vacunación, el crecimiento de los ingresos y la capacidad de pedir prestado, dijo el Fondo Monetario Internacional (FMI) en su Monitor Fiscal.
Los niveles de deuda global aumentaron a un récord de 226 billones de dólares en 2020, un salto de 27 billones de dólares en solo un año que supera con creces la ganancia acumulada de 20 billones de dólares observada durante los dos años durante la crisis financiera mundial de 2008 y 2009, mostró el informe.
"Alrededor del 90 por ciento de ese aumento provino de las economías avanzadas, más China, con economías emergentes y en desarrollo mucho menos capaces de acceder a los mercados financieros para sus necesidades de gasto y también más vulnerables a posibles aumentos de las tasas de interés", dijo Vitor Gaspar, jefe de política fiscal del FMI.
"La gran brecha de las vacunas, el cambio climático y la brecha financiera son problemas globales que exigen una acción global", señaló y advirtió que los países de bajos ingresos enfrentan desafíos que podrían desacelerar las perspectivas de crecimiento durante años.
La pandemia, comentó Gaspar, ha exacerbado las brechas financieras "ya considerables" que enfrentan los países de bajos ingresos antes de la crisis.
EGC