Para las mujeres mexicanas tener los mismos ingresos salariales que los hombres representa un gran reto y éste se va complicando aún más cuando tienen hijos, pues la brecha salarial es de 56.6 por ciento; es decir, aún mayor que para personas sin hijos.
Así lo reveló el Informe “Maternidad, un castigo en el ingreso de las mujeres”, elaborado por la organización México, ¿Cómo Vamos?, que señaló que las brechas de ingresos entre mujeres y hombres se va haciendo más grande a medida de que se incrementa el número de hijos, aumenta la edad o se tiene un menor nivel educativo.
Según los resultados basados en la Encuesta Nacional de Ingresos y Gastos de los Hogares (ENIGH) de 2022, las mujeres sin hijos reciben en promedio 6 mil 619 pesos mensuales a diferencia de los hombres que ganan 8 mil 365 pesos al mes y aunque su diferencia de ingresos es significativa la brecha salarial es de 20.9 por ciento.
En contraste, la brecha de ingresos entre hombres y mujeres que son padres o madres, se exacerba en 35.7 puntos porcentuales más que para personas sin hijos.
“Esta disparidad en el ingreso que representa la maternidad para las mujeres, en contraste con la paternidad para los hombres, está relacionada con las diferencias en la distribución del tiempo que destinan a labores remuneradas y no remuneradas”, destacó la organización.
Explicó que en 2022, los hombres destinaban 45.5 horas a la semana al trabajo remunerado, mientras que las mujeres destinaban 36.7 horas. Por el contrario, en el trabajo no remunerado, las mujeres destinan una jornada laboral completa (47.8 horas) a diferencia de los hombres, quienes sólo dedican 24 horas a realizar tareas como quehaceres del hogar, cuidado de personas o la preparación de alimentos.
“La diferencia de horas dedicadas a labores no remuneradas son una de las razones por las que la baja participación laboral de las mujeres continúa siendo uno de los problemas estructurales del mercado laboral mexicano”, puntualizó.
Cabe señalar que de acuerdo con una encuesta de la OCC realizada en abril y mayo de 2024, cuatro de cada 10 mujeres encuestadas informaron que no tienen hijos ni planean tenerlos en un futuro cercano.
Esto debido a que 12 por ciento consideró que al convertirse en madre sus ingresos se verían afectados; mientras que 7 por ciento señaló que no podría conciliar la maternidad con el trabajo.
Asimismo, la encuesta reveló que 3 por ciento afirmó que en el área de trabajo en la que se desempeña no hay oportunidades para las madres; además de que 2 por ciento indicó que teme sufrir algún tipo de discriminación laboral por esta razón.
En tanto, 36 por ciento de las mujeres encuestadas aseguró que percibe un riesgo de sufrir estrés laboral por realizar las actividades que conllevan la maternidad y las funciones de su trabajo.
