La Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (Canacintra) aseveró que de llevarse a cabo mal la reforma al outsourcing costaría un millón de empleos en total entre diciembre y enero próximos.
El presidente de la Cámara, Enoch Castellanos, señaló que el propio Gobierno filtró una propuesta que le hizo al empresariado bajo la actitud de “tómalo o déjalo”; sin embargo, desde Canacintra rechazaron los términos de la iniciativa.
El día de ayer se dio a conocer una carta presuntamente del Gobierno federal en la que le pedía al empresariado aceptar las modificaciones iniciales al outsourcing a más tardar el día de hoy.
Canacintra agregó que en los diálogos que mantienen los empresarios con el Gobierno federal hay avances en desaparecer el insourcing, pero se dejaría desprotegidas a las micro, pequeñas y medianas empresas (MiPymes) que no tienen oportunidad de constituir firmas alternas a diferencia de los grandes corporativos.
Recordó que el insourcing es la creación de una empresa filial dentro de un grupo que administra el personal de un centro de trabajo y de una planta que no tiene empleados, con la intención de tener una disminución en el pago del TPU. “Lo que estamos buscando es que se ligue a esquemas de productividad”, comentó.
“Si no hacemos esto bien, de manera inmediata se perderían 500 mil empleos en diciembre y podrían perderse otros 500 mil empleos en enero, únicamente en la transición de las empresas de una razón social a otra. Eso sería únicamente responsabilidad de quienes empujen a fuerza esta ley sin considerar a los sectores productivos”, aseveró Enoch Castellanos.
El presidente de la Canacintra hizo votos para que el sector empresarial negocie en su conjunto, analizando los intereses de quienes ahí están representados, y que finalmente haya sensatez en el Gobierno federal, para que al final sí se castigue a quienes explotan a los trabajadores y abusan de ellos.