El mercado laboral en México se consolidó durante 2023 con la creación de 1.2 millones de empleos, así como con niveles mínimos en la tasa de desempleo de 2.6 por ciento y en la de informalidad de 53.6 por ciento al cierre del año, de acuerdo con información del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
Con base en los resultados de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE), la población ocupada pasó de 57.9 millones en diciembre del 2022 a 59.1 millones en el mismo mes del 2023, lo que significa un incremento de 1.2 millones, es decir, 2.1 por ciento más.
El empleo estuvo impulsado por aumentos en los servicios (982 mil 366 más) y la producción industrial (652 mil 415), mientras que el empleo en el sector primario cayó (439 mil menos).
En tanto, la población desocupada fue de 1.6 millones de personas en diciembre del año pasado, con una disminución de 59 mil 433 con relación a igual mes del 2022.
Así, la tasa de desocupación disminuyó 0.2 puntos porcentuales, al pasar de 2.8 por ciento en diciembre del 2022 a 2.6 por ciento en el mismo mes del 2023, con lo cual se ubicó en su menor nivel para un cierre de año desde 2005, cuando inició el registro de este indicador.
Con ello, la PEA ascendió a 60.7 millones en diciembre de año pasado, lo que significa un aumento de 1.1 millones de personas en comparación con los 59.5 millones en el último mes del 2022.
A su vez, en diciembre del 2023, la población ocupada en la informalidad laboral fue de 31.7 millones de personas, con una reducción de 97 mil 774 en comparación al mismo mes del año previo.
De esta manera, la tasa de informalidad laboral disminuyó de 54.9 por ciento en diciembre del 2022 a 53.6 por ciento de la población ocupada el último mes del 2023.
Así, la informalidad laboral se ubicó en un nivel mínimo para un cierre de año desde que inició el registro de este indicador (2005), pero todavía significa que una de cada dos personas está en este sector.
Al respecto, Grupo Financiero Citibanamex consideró que los datos del Inegi muestran que, durante el año pasado, las condiciones en el mercado laboral se fortalecieron, ya que las tasas de desempleo, subempleo e informalidad cayeron, mientras que el empleo y los salarios aumentaron.
Así, las cifras anuales del 2023 sugieren que las condiciones siguen apretadas, pero que se han estabilizado, agregó.
Para 2024, la institución financiera estimó un relajamiento gradual en las condiciones del mercado laboral a medida que se desacelere la actividad.
“Estimamos que la tasa de desempleo aumentará gradualmente, dada la desaceleración proyectada para la actividad y la pérdida de dinamismo que persistiría en la creación de empleos”, expuso en un análisis.
Así, proyectó una tasa de desempleo promedio de 3.0 por ciento, 0.2 por ciento por encima de la cifra del 2023, y aumentos anuales promedio del empleo y salarios o trabajadores registrados en el IMSS de 2.6 y 3.7 por ciento, respectivamente, desde 3.6 y 5.1 por ciento en 2023.
En tanto, Grupo Financiero Banorte estimó que estas cifras son consistentes con una consolidación relevante del mercado laboral, apoyado por una demanda interna boyante y con algunos posibles cambios estructurales en juego, principalmente relacionados al efecto nearshoring.
Anticipó que la creación de empleo continuará en el primer semestre del 2024, impulsada por del aumento del gasto gubernamental, manteniendo la tasa de desempleo baja. No obstante, estimó que esta última puede ajustarse al alza en la segunda mitad ante un escenario económico más retador.
“Creemos que en el segundo semestre la moderación en la actividad económica podría impactar las necesidades de trabajo. Así, esperamos que la tasa de desempleo se mantenga relativamente baja a lo largo del primer semestre del 2024, pero cerrando el año ligeramente más alta en 3.4 por ciento”, añadió.
