A causa de la pandemia de COVID-19, el sector asegurador registró una contracción de 2.7 por ciento en términos reales, impulsado principalmente por la caída en pólizas de automóviles y daños sin contabilizar vehículos, informó la Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros (AMIS).
En videoconferencia de prensa, Norma Alicia Rosas Rodríguez, directora general de la AMIS, indicó que si se contabiliza la póliza multianual de Petróleos Mexicanos (Pemex), que dura 24 meses, el sector hubiera presentado una disminución únicamente de 1.0 por ciento real anual.
“Normalmente el desempeño del sector está muy ligado al desempeño de la economía en general. La economía en su conjunto, expresado por el PIB, presentó una contracción muy importante de 8.2 por ciento en términos reales respecto al año anterior. Entonces bajo este escenario de cierta desaceleración de la economía, pues se desempeñó nuestro sector asegurador”, explicó la directiva.
Segmentos destacables para las aseguradoras
Según el reporte de la AMIS, los segmentos más destacables fueron accidentes y enfermedades, que crecieron 7.6 por ciento en 2020, al pasar de 91 mil 995 millones de pesos en 2019, a 102 mil 068 millones de pesos al cierre del año pasado.
Esta alza, explicó Rosas Rodríguez, está influenciada por el crecimiento que tuvo gastos médicos, que creció 8.9 por ciento en términos reales; además de la creación de productos que se diseñaron para cubrir el COVID-19 y de los cuales las empresas adquirieron de forma preventiva.
Otro comportamiento relevante fueron las pólizas de pensiones, que en monto se incrementaron 3.8 por ciento real anual, con 29 mil 183 millones de pesos. Su incremento estuvo relacionado con el número de pensiones que dictaminan tanto el ISSSTE como el IMSS.
Resultados negativos para el sector asegurador
Por el contrario, la AMIS aseveró que las primas directas de automóviles se contrajeron 10.8 por ciento, el peor comportamiento de todos los segmentos. Esto derivado de la caída de la venta de vehículos nuevos en 2020, misma que cayó 28 por ciento, según datos de la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA).
El ramo de daños sin autos se desplomó 5.6 por ciento, con 98 mil 948 millones de pesos en primas directas. La AMIS explicó que esto pudo responder a los declives en sectores como la construcción o el turismo a causa del COVID-19.
Finalmente, los seguros de vida también tuvieron un resultado negativo. En 2020 cayeron 2.2 por ciento. “Aquí destaca de manera muy relevante, en los seguros de vida individual, el decremento de 3.5, y en las de grupo que son las pólizas que generalmente pagan los empleadores para todos sus empleados hubo un crecimiento en términos reales de 1.8 por ciento”, apuntó.
