Todos y todas tenemos un pantalón de mezclilla en nuestro clóset. Mentiríamos si no. Es una prenda que nos saca de muchos apuros. Si bien todo comenzó con unos jeans estilo vaqueros, ahora los hay de distintos modelos y que provocan que nuestro cuerpo se sienta lo más cómodo posible: desde los skinny que parecen mallas hasta los "pantalones de tienda", que nos hacen sentirnos a nuestras anchas.
Sin embargo, y aún con que todos tenemos unos jeans en nuestro clóset, pocos sabemos el origen de esta prenda que tanto queremos y que tanto se usa alrededor del mundo. Si eres parte de ese sector de la población que no tiene idea cuál es el origen de los jeans, te lo compartimos a continuación.
¿Cuál es el origen de los jeans?
La mezclilla, como tal, fue producida en Francia, en un lugar situado al sur llamado Nimes, por allá del año 1800. Los obreros en las minas necesitaban vestimenta que los protegiera y que también les permitiera trabajar muchas horas sin que se lesionaran al momento de realizar sus actividades laborales.
Seguramente el siguiente término te sonará familiar: "overall". Ese fue el primer modelo que se convirtió en el más popular, hecho con mezclilla en un color índigo, llamado así porque provenía de la India. Este modelo de jean que conocemos en occidente como "overol", permitía que los trabajadores estuvieran protegidos en la mayor parte del cuerpo y que además tuvieran compartimentos en la prenda que les permitiera guardar algunas herramientas y tenerlas más a la mano.
53 años después, llegó Levi Strauss a San Francisco, a vender materiales para obreros, incluidos los pantalones "denim", cuyo nombre es por Nimes, el lugar en donde la mezclilla se produjo por primera vez. Strauss, junto a su socio Jacob Davis, consiguieron la patente de los jeans como los conocemos actualmente, al darse cuenta que al reforzar la tela, la mezclilla, podrían crear prendas mucho más funcionales que no sólo fueran usadas por los obreros, sino por hombres y mujeres, con todo y el machismo que imperaba en aquellas épocas.
Los jeans como prenda democrática
Fue en la década de los 50 cuando la prenda comenzó a ser popular entre la juventud, sin embargo, hasta la década de los 70, tomó un valor todavía mucho más político, al ser usada por mujeres que luchaban por derrocar los estereotipos misóginos y machistas trasladados hasta la ropa. Los jeans se comienzan a usar como una prenda que no distinguía ni sexo, ni religión y mucho menos estratos sociales o razas, luego del fin de la Guerra Fría en Estados Unidos.
Si bien la terlenca y las telas mucho más ajustadas como el látex o las prendas más sintéticas tuvieron su apogeo en la época disco, llegaron los 80 para demostrar que los jeans habían llegado para quedarse. Aún con la incorporación de la prenda a grandes casas de moda como Yves Saint Laurent, los jeans se convirtieron todavía más en una prenda de protesta hasta en el ramo musical, en donde personajes como Steve Perry, de Journey, Kim Carnes, o el mismísimo boss, Bruce Springsteen, las utilizaban como reflejo de la comodidad que daba el género musical que interpretaban.
Llegaron para quedarse y hoy ya tienes idea del origen de esta popular prenda que todo el mundo usamos.
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