Los flujos de remesas se desplomarán 20 por ciento en 2020 debido a que los migrantes perderán su trabajo o disminuirán sus ingresos a causa de la crisis de COVID-19, lo cual reducirá su capacidad de enviar dinero a sus familias en sus países de origen, estimó el Banco Mundial (BM).
El economista principal de Migración y Remesas del BM, Dilip Ratha, refirió que el organismo internacional estima que las remesas bajarán de 554 mil millones de dólares en 2019 a 445 mil millones de dólares este año, lo que implica una seria afectación al sustento que significan estos países para los países pobres.
Así, mientras durante la llamada la crisis financiera de 2009 las remesas cayeron aproximadamente 5 por ciento y luego se recuperaron rápidamente, este año se contraerán 20 por ciento porque el impacto de la pandemia de COVID-19 no tiene precedente, ya que está afectando a todos los países del mundo, incluso en aldeas remotas.
Ratha explicó que esta disminución se explica principalmente por la crisis de COVID-19, ya que los confinamientos, el distanciamiento social y la imposibilidad de viajar, han impedido las personas, donde quiera que se encuentren, poder enviar dinero a sus países.
Pero el impacto principal provendrá del hecho de que las personas no podrán encontrar empleo. Los migrantes son más vulnerables durante tiempos de crisis que las personas nativas, y perderán sus trabajos o sus ingresos disminuirán, por lo que su capacidad de enviar dinero se reducirá ese es el principal factorDilip Ratha, economista de remesas del BM
En una entrevista difundida a través de las redes sociales del organismo, el especialista del BM comentó que hay unos 200 millones de migrantes internacionales que envían dinero a sus familias, las cuales lo usan para comida, vivienda, ropa, invertir en negocios, mandar a los hijos a la escuela y atención de la salud.
De manera que cuando los migrantes envían dinero a casa, tiene un gran impacto en la reducción de la pobreza ya que las remesas son en realidad un sustento para una gran cantidad de hogares, especialmente los pobres, y cuando estos flujos disminuyen, pueden caer en pobreza.
KA