La exención de aranceles como parte del Paquete Contra la Inflación y la Carestía (Pacic) tendrá un impacto potencial limitado, ya que se facilitará la importación de bienes desde países con los que México no tiene tratados, pero desde los cuales la proporción importada de los productos es relativamente baja, afirmó el Instituto Mexicano para la Competitividad (Imco).
El organismo recordó que, como parte de su plan antiinflación, el Gobierno federal publicó el 16 de mayo en el Diario Oficial de la Federación (DOF) un decreto mediante el cual se eliminará temporalmente el pago de aranceles de importación a 21 productos que forman parte de la canasta básica de consumo y 6 insumos considerados estratégicos.
En conjunto, agregó, los 21 productos que quedan exentos de aranceles representan alrededor de 12 por ciento del gasto que realizan los consumidores mexicanos en la compra de los bienes que forman parte de la canasta básica del Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC).
Algunos con mayor peso en índice son las carnes de res, ave, leche pasteurizada, cerdo, y el huevo. Tan sólo los tres primeros concentran el 5 por ciento del gasto total de los consumidores.
Recordó que México tiene tratados de libre comercio con 50 países, lo cual significa que ya da trato preferencial en materia de aranceles a diversos países, incluso eliminándolos por completo para ciertos productos.
Por tanto, el decreto beneficia principalmente a las importaciones provenientes de naciones con las que no hay un acuerdo comercial, como Brasil, Argentina y China, añadió el Imco.
Sin embargo, acotó, debe tenerse en cuenta que gran parte de los productos que México compra en el exterior provienen de Estados Unidos, el principal socio comercial del país; al ser uno de los tres miembros del T-MEC, el comercio con este país ya goza de beneficios en términos de exención de aranceles.
De acuerdo a lo establecido en el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), los 21 productos de consumo básico anunciados en el decreto están exentos de aranceles cuando provienen del vecino país del norte, como ya ocurre.
Entonces, el estímulo que se pretende dar a partir de la exención en realidad podría tener un bajo impacto para aumentar la oferta y disponibilidad de estos productos básicos, pese a que varios de ellos tienen un impuesto general a la importación (IGI) superior al 15 por ciento de su valor.
CEHR
