La multinacional Enerflex anunció que solicitó iniciar un arbitraje internacional contra el Estado mexicano ante el Centro Internacional de Arreglo de Diferencias Relativas a Inversiones (Ciadi), ya que un laudo laboral emitido contra la empresa viola el T-MEC y el TLCAN, así como otros tratados, por lo que evalúa continuar su plan de inversión en el país.
Las subsidiarias mexicanas de Enerflex son responsables de tratar aproximadamente 50 por ciento del gas natural producido costa adentro en México.
En un comunicado, expuso que como socio a largo plazo de Petróleos Mexicanos (Pemex) y otros operadores en México, Enerflex quiere seguir operando y contribuyendo al crecimiento continuo del mercado energético en México.
Sin embargo, advirtió que “el asunto actual crea una incertidumbre innecesaria para el futuro de Enerflex en México y debería hacer que otros inversores extranjeros se replanteen sus inversiones en México”.
Enerflex denunció que el laudo laboral que data de 2015 es ilegal y arbitrario por parte de la Junta Especial Número Tres de la Junta Local de Conciliación y Arbitraje de Tabasco.
En el laudo se ordena a sus filiales Exterran Energy Solutions L.P., Exterran Energy de México y Gas Conditioning of Mexico a pagar más de dos mil millones de pesos (equivalente a más de 120 millones de dólares) de indemnización a un exempleado de nivel medio.
Enerflex declaró que “cualquier ejecución del laudo de dos mil millones de pesos podría causar una expropiación indirecta, lo que equivale a un trato fundamentalmente injusto e inequitativo”.
“Por ello, Enerflex ha tomado la decisión de iniciar un arbitraje de inversión para defender sus derechos y solicitar una indemnización por daños y perjuicios”, agregó.
Explicó que la finalidad de acudir al Ciadi es solicitar la indemnización respectiva por parte de México, derivada de las claras violaciones al derecho internacional “si no se corrige la injusta y lesiva actuación del Estado mexicano”.
La empresa señaló que este acto constituye una “expropiación indirecta” y un trato arbitrario por parte del Estado mexicano al exigir una indemnización “extraordinaria, injusta y sin causa”.
A través de sus filiales, Enerflex opera en México desde 1997 con una inversión acumulada de más de 400 millones de dólares.
Actualmente tiene inversiones en Reynosa, Veracruz, Villahermosa y otras localidades en el norte y sur de México.
Ha instalado más de 200 unidades compresoras en el país que son operadas por 300 empleados altamente capacitados, responsables de apoyar en sus operaciones en México, resultando en el tratamiento, acondicionamiento y compresión de más del 50 por ciento del gas natural producido costa adentro en México a través de contratos con Pemex y otros productores privados de hidrocarburos.
La empresa reiteró que el laudo representa una clara violación de México a sus compromisos adquiridos por virtud de los tratados internacionales, incluyendo el T-MEC y el TLCAN, que protegen las inversiones de Enerflex y sus subsidiarias en México.