Francisco Cervantes Díaz fue reelecto por tercera vez consecutiva para dirigir al Consejo Coordinador Empresarial (CCE), cúpula empresarial que aseguró, se regirá por un “camino opuesto a la confrontación, polarización y conflicto” y en la que en todo momento se buscará la “apertura y el diálogo” entre el sector privado y los actores políticos de los tres niveles de gobierno.
Durante su discurso en la XLI Asamblea Anual Ordinaria de Asociados del CCE, en la que fue reelecto por unanimidad, sostuvo que durante sus dos años de gestión en la máxima cúpula empresarial de México, siempre tuvo la convicción de manejarse bajo una filosofía de diálogo y respeto al Estado de derecho y así continuará.
“El diálogo es el único camino para generar confianza y abrir paso a los acuerdos, cuya base es el respeto al Estado de derecho para dar certeza y transparencia”, destacó Cervantes Díaz, ante la presencia de la secretaria de Economía (SE), Raquel Buenrostro, y la canciller Alicia Bárcena, así como otros miembros del sector empresarial.
Señaló que esta estrategia ha dado frutos en el crecimiento económico del país, pese al escenario que dejó la pandemia de Covid-19, la cual generó una nueva dinámica de relaciones económicas y comerciales: ”hemos pasado de la libre globalización a la etapa de la relocalización o nearshoring”.
Abundó que este fenómeno está dando la oportunidad a México de convertirse en uno de los “beneficiarios más importantes” a nivel mundial. De hecho, Francisco Cervantes aseguró que el país ya se está favorecido en diversos aspectos como los aumentos sensibles del comercio y la inversión; colocarse como el principal socio comercial de Estados Unidos; y haber alcanzado tasas de crecimiento superior a lo pronosticado.
El presidente del CCE explicó que aunque la consolidación de la era del nearshoring coincidió con las elecciones presidenciales de México, aún así debe seguir impulsando los beneficios de la relocalización de las empresas.
Para ello, resaltó que en su tercer año de gestión se tendrá una agenda enfocada a lograr “un México mejor para todos”, basada en la inclusión, en una economía de desarrollo sostenible y en la vigencia de un país de leyes sin corrupción con el objetivo de atraer más inversiones del fenómeno de la relocalización de empresas.
Cervantes Díaz detalló que para lograr este impulso el Consejo Coordinador Empresarial trabajará sobre cinco grandes retos: el fortalecer el Estado de derecho y la certeza regulatoria para facilitar la instalación y apertura de negocios, además del comercio y la inversión, bajo condiciones leales de competencia.
El segundo está relacionado con el desarrollo de infraestructura necesaria y rentable en movilidad, conectividad, disponibilidad de energías limpias y uso de agua con sentido sustentable.
Reforzar las políticas de educación, capacitación y modernización tecnológica de las empresas, con un enfoque de competitividad.
Aprovechar las ventajas y vocaciones regionales del país para la relocalización, incluyendo el sur de México.
Contar con una política eficaz de seguridad que garantice las actividades empresariales.