En la primera quincena de noviembre la inflación general disminuyó a 8.14% anual, registrando así su segunda desaceleración en comparación con la segunda quincena de octubre, cuando se ubicó en 8.41 por ciento y por debajo de lo esperado por el consenso de analistas de 8.25 por ciento.
El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) publicó el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC), el cual arrojó que si bien hubo una baja en el índice general, en la inflación subyacente se mantiene presión (ésta marca la tendencia del indicador en el corto y mediano plazo) ya que volvió a incrementar a 8.66 por ciento, superando de nuevo cuenta el índice general.
Al interior del índice subyacente, los precios de las mercancías crecieron 0.35 por ciento y los de servicios, 0.34 por ciento a tasa quincenal.
Dentro del índice no subyacente y a tasa quincenal, los precios de los productos agropecuarios disminuyeron 0.37 por ciento y los de energéticos y tarifas autorizadas por el gobierno crecieron 2.53 por ciento.
Lo anterior, en mayor medida, por la conclusión del subsidio al programa de tarifas eléctricas de verano que se aplicó en 11 ciudades del país.
De manera detallada, los mayores precios en el periodo de referencia se observaron en el chile serrano, con un aumento quincenal de 26.1 por ciento; la electricidad, en 20.29 por ciento; el transporte aéreo, con 12.93 por ciento; los nopales, con 11.39 por ciento y los servicios profesionales, con un aumento de 10.41 por ciento.
En tanto, los precios que más disminuyeron fueron la cebolla, con una caída de 13.02 por ciento; el melón, con una baja de 8.70 por ciento; el tomate verde, con un descenso de 9.26 por ciento y la calabacita con -7.93 por ciento.
AÚN NO ESTÁ SUPERADO
El subgobernador del Banco de México (Banxico), Jonathan Heath, señaló que para el cierre de este mes de noviembre se podría presentar una caída más importante en la inflación subyacente; sin embargo, dijo que ésta no debe interpretarse como que el indicador ya está cediendo, debido a que contemplará las bajas en los precios de las mercancías por El Buen Fin.
En su cuenta de Twitter, sostuvo que, El Buen Fin del 2021 se llevó a cabo en la primera quincena de noviembre, por lo cual en ese momento la disminución del indicador fue mayor; no obstante, para este año la campaña de descuentos cayó en la segunda quincena por lo que es de esperarse una caída en la subyacente.
“En esta ocasión, debemos fijarnos en la tasa mensual de noviembre (promedio de las dos quincenas) para tratar de descifrar la distorsión temporal del buen fin. Sin embargo, aun si baja la subyacente no hay que cantar victoria, pues un dato no hace tendencia”, destacó.
Al respecto, la consultoría Salles Sainz Grant Thornton, señaló que, pese a que en los últimos datos de inflación se podría vislumbrar una caída en los precios y por ende una estabilización, las expectativas no arrojan que la inflación esté bajo control.
“Las señales más recientes son positivas, pero cuando se decida eliminar el subsidio a las gasolinas podría cambiar nuevamente el escenario. Hay pronósticos a la baja, sí, pero es imprescindible que se siga con la guardia alta”, señaló el socio director de la firma, Mauricio Brizuela, durante la presentación del evento anual Perspectivas Económicas y Fiscales 2023, realizado el día de ayer.
RIESGOS SIGUEN AL ALZA: BANXICO
En las minutas de la decisión de política monetaria del Banxico del pasado 10 de noviembre, los integrantes de la Junta de Gobierno señalaron que las presiones sobre los precios en las materias primas y las disrupciones en las cadenas de suministro han dado señales de mitigación; sin embargo, la mayoría señaló que el balance de riesgos para la trayectoria prevista de la inflación sigue sesgado al alza.
En 2023, por ejemplo, se espera una presión superior derivado de un incremento en los costos asociados a las condiciones de contratación o revisiones salariales.
Uno de los miembros añadió que, ante una inflación subyacente que todavía no disminuye y un balance de riesgos para la inflación sesgado al alza, se requiere de un apretamiento monetario adicional.
fgr