La inflación anual en México se desaceleró en la primera mitad de mayo de este año a 7.58 por ciento, la más baja en cuatro quincenas, es un leve respiro a la economía familiar, pero no es motivo para “echar las campanas al vuelo” ni “cantar victoria”, coincidieron representantes del sector privado y analistas.
El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) informó que durante la primera quincena de mayo, el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) retrocedió 0.06 por ciento, luego de 17 periodos al alza, debido sobre todo a la entrada en vigor del ajuste en las tarifas eléctricas por la temporada cálida.
Los productos con el mayor incremento durante la primera quincena de mayo fueron el aguacate con alza de 13.38 por ciento, jitomate 7.92 por ciento, loncherías, fondas, torterías y taquerías con 0.58 por ciento, transporte aéreo 9.76 por ciento y huevo 1.94 por ciento.
Por el contrario, los que más disminuyeron en la primera mitad del presente mes fueron electricidad 20.36 por ciento, limón 24.62 por ciento, cebolla 11.42 por ciento, chile serrano 16.38 por ciento y refrigeradores 3.87 por ciento.
El organismo reportó que la inflación subyacente, que determina la trayectoria de la inflación en el mediano y largo plazo, registró un aumento quincenal de 0.31 por ciento y anual de 7.24 por ciento, vio su primer descenso en 17 quincenas.
En tanto, la inflación no subyacente, que incluye los precios más volátiles como son agropecuarios, energéticos y tarifas autorizadas por distintos órdenes de gobierno retrocedió 1.15 por ciento a tasa quincenal y se incrementó 8.60 por ciento a tasa anual
Con ello, la inflación anual se moderó de 7.65 por ciento en la segunda quincena de abril a 7.58 por ciento en la primera semana de mayo, su segunda baja quincenal consecutiva, pero hiló 29 quincenas por arriba de la meta del Banco de México (Banxico), de 3.0 por ciento, más/menos un punto porcentual.
El presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), Francisco Cervantes, aseguró que la baja marginal de la inflación no es motivo para echar las campanas al vuelo.
“El impacto principal es que se está conteniendo (la inflación). No hay que echar las campanas al vuelo. Seguimos preocupados. La proveeduría está lenta y seguimos siendo dependientes de las importaciones”, señaló en entrevista al término de su participación en la ceremonia inaugural de la 31 Convención de Aseguradores de la Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros (AMIS).
Comentó que a unas semanas de que entró en marcha el plan para contener el aumento de precios en 24 productos de la canasta básica, no se han registrado desabasto de insumos; sin embargo, el entorno inflacionario sigue siendo preocupante.
Cuestionado en el mismo foro, el presidente de la Asociación Nacional de Tiendas de Autoservicio y Departamentales (ANTAD), Vicente Yáñez Solloa, coincidió en que, a pesar del retroceso del índice inflacionario, “no es momento de cantar victoria, toda vez que el fenómeno de inflación estará presente por lo menos en lo que resta del año”.
“No pensemos que es una bala de plata que va a solucionar el problema, toda vez que la inflación viene del exterior por los efectos de la pandemia y por la guerra en Ucrania que no permiten bajar el nivel de precios de los combustibles. Eso va a hacer más difícil que baje la inflación; primero se tienen que enderezar las cosas a nivel mundial”, aseguró.
El economista económico de Grupo Financiero Monex, Marcos Arias Novelo, expuso que la desaceleración de la inflación muestra que se está estabilizando, pero es pronto para “cantar victoria” y decir que ya alcanzó un pico.
En videoconferencia, precisó que en la primera mitad de este mes todavía no se refleja un impacto en los precios de la canasta básica del Paquete Contra la Inflación y la Carestía (Pacic) anunciado el 4 de mayo, lo que podría ocurrir hasta dentro de dos o tres meses, “si es que tiene éxito”.
Por su parte, Grupo Financiero Ve por Más (Bx+) estimó que el ligero retroceso de los precios al consumidor en la primera quincena de mayo debe tomarse como una “aparente” disminución, toda vez que es resultado de efectos estacionales en los precios de la electricidad.
Aunque la inflación quincenal fue menor a la del mismo periodo del 2020 y 2021, sigue siendo elevada, si se compara contra el promedio 2010-2019, con un retroceso de 0.44 por ciento.
Previo que la inflación anual seguirá moderándose en los próximos meses, debido a la alta base de comparación. “Sin embargo, el panorama sigue siendo incierto y exhibe diversos riesgos al alza; anticipamos que la variable no vuelva a ubicarse debajo del 4.0 por ciento antes del 2024”.
Ante un panorama deteriorado de inflación, estimó que el Banxico elevará en 50 puntos base la tasa de referencia en su reunión de junio próximo.
