Cerca del 31 por ciento de las personas LGBTQ+ declararon sentirse deprimidas en el trabajo siempre o casi siempre en los últimos dos años, debido a que perciben que sus lugares de trabajo son sitios poco inclusivos para desarrollar sus actividades.
Esta cifra es 13 puntos porcentuales mayor que la de sus compañeros heterosexuales, señaló el estudio Work in Progress realizado por Buk, una plataforma tecnológica de gestión de recursos humanos en México y Latinoamérica.
El análisis refiere que más allá de los gestos simbólicos que suelen realizar diversos organismos con motivo de la celebración del Día Mundial del orgullo LGBTQ+, reveló que aún persisten importantes desafíos que reflejan los obstáculos que enfrentan las personas de la comunidad en sus lugares de trabajo.
Esta disparidad también se observa en los niveles de estrés y compromiso laboral, ya que las personas de la comunicad suelen sentirse estresadas con más frecuencia y menos comprometidas con sus empleos; mientras que 63 por ciento de las personas que se identifican como heterosexuales se declaran felices en sus trabajos, esto disminuye a 50 por ciento para el grupo LGBTQ+, una diferencia significativa entre ambos grupos.
Al respecto, sostiene que, aquellas empresas que apoyan iniciativas LGBTQ+ registran menores niveles de estrés y ansiedad. Así, las personas que reportan mayores niveles de satisfacción con las políticas de diversidad e inclusión de sus empresas, también son las que se sienten más felices.
Por ejemplo, 80 por ciento de las personas que se declaran completamente satisfechas con la política de D&I de su empresa —organizaciones con entornos respetuoso—, reportan sentirse felices siempre o casi siempre. En contraste, sólo el 30 por ciento de las personas muy insatisfechas con esta política, dicen sentirse felices con frecuencia, lo que marca una diferencia significativa entre ambos.
“Estudios realizados en Latinoamérica han mostrado cómo crear lugares de trabajos diversos e inclusivos contribuye al desempeño financiero de las organizaciones, al compromiso del talento y a mejorar los niveles de felicidad de los colaboradores (McKinsey, 2020). Por esto mismo, como sociedad tenemos una gran oportunidad para detenernos a mirar las cifras y comprender en qué medida podemos construir lugares de trabajos diversos y seguros para todos, incluyendo desde luego a la comunidad LGBTQ+”, afirmó Andrés Gómez, CEO de Buk México.
Lo anterior toma mayor relevancia si se considera que las personas de la comunidad sienten la necesidad de ocultar su orientación sexual, moderar sus actitudes, u ocultar información personal para no quedar expuestas a situaciones discriminatorias que puedan afectar su desarrollo profesional.
Los escenarios en Latinoamérica refieren que mientras que en Chile 45 por ciento de las empresas encuestadas para el estudio indicó contar con una política de diversidad e inclusión, en Perú sólo 21 por ciento de las empresas tiene una, lo que revela una disparidad en la región al respecto.
