En México, 26 por ciento de las mujeres de entre 25 y 34 años cuentan con un título de educación superior, pero aquellas con este nivel de estudios que se desempeñan en el mercado laboral ganan 25 por ciento menos que los hombres en las mismas condiciones, reveló un estudio de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).
A través del documento “Education at a Glance 2021”, el organismo internacional dio a conocer que las mujeres mexicanas tienen más probabilidades que los hombres de terminar estudios en educación media superior o superior, pero esto no necesariamente se traduce en la obtención de mejores salarios o prestaciones, ya que los análisis realizados arrojan que ellas perciben 34 por ciento menos respecto a la remuneración de los hombres.
Agregó que en más de la mitad de los países miembros, la brecha de género es la más amplia entre los adultos con educación superior. Australia, Canadá, Costa Rica, Estonia, Israel, Letonia, México y el Reino Unido son los únicos países donde los ingresos están más cerca entre hombres y mujeres.
“Las mujeres no ganan tanto como los hombres en ningún país de la OCDE. En promedio, entre los adultos con un nivel inferior al universitario, las mujeres con ingresos laborales ganan sólo 66 por ciento de los ingresos de los hombres”, especifica el documento.
Entre los motivos de esta desigualdad salarial, explicó que incluyen los estereotipos de género, las convenciones sociales y la discriminación contra la mujer, pero también diferencias con los hombres en la elección de campos de estudio, pues las opciones de ellos se enfocan en campos como ingeniería, manufactura y construcción e información y tecnologías de la comunicación; mientras que las de ellas van hacia la educación, las artes y las humanidades.
“Otras razones pueden estar relacionadas con las dificultades para combinar una carrera profesional con la familiar. y responsabilidades familiares. Para gestionar estos diferentes compromisos, es más probable que las mujeres busquen caminos menos competitivos y una mayor flexibilidad en el trabajo, lo que genera ingresos más bajos que los hombres con el mismo nivel educativo”, señaló.
Por otro lado, abundó que si bien la mayoría de los países han logrado limitar la proporción de jóvenes no escolarizados a menos de 5.0 por ciento en 2019, aproximadamente una cuarta parte de los países que integran la OCDE alcanzaban más del 10 por ciento; pero México exhibió las tasas más altas, con más de 25 por ciento.
La tasa de mujeres y hombres jóvenes sin escolarizar sigue siendo de tres puntos porcentuales o menos en casi todos los países, excepto en nuestro país en donde es de cuatro puntos porcentuales más alta entre los varones.
En promedio en los países de la OCDE, entre 47 por ciento de los adultos jóvenes de 18 a 24 años que no están en educación, alrededor de dos tercios de los adultos jóvenes están empleados y alrededor de un tercio están inactivos o desempleados.
Finalmente, informó que, en promedio en los países de la Organización, 15.1 por ciento de los jóvenes de 18 a 24 años no estudian ni trabajan. Por ejempleo, en Alemania, Islandia, Luxemburgo, los Países Bajos, Noruega, Eslovenia, Suecia y Suiza, el porcentaje de estas personas es menos del 10 por ciento; mientras que en Argentina, Chile, Costa Rica, Italia y México está entre 20 y 30 por ciento; y más de este porcentaje en Brasil, Colombia y Turquía.