El número de pobres en México pasará de 34 millones a 66 millones debido al fuerte impacto social que tendrá la crisis por la pandemia de COVID-19 y se espera un empobrecimiento importante de las clases medias, especialmente de los segmentos más vulnerables, estimó el Banco Interamericano de Desarrollo (BID).
En su nuevo estudio “ALC Post COVID-19”, señaló que el mercado de trabajo está en crisis y proyectó una caída de 4.1 por ciento de empleos si la pandemia da lugar a una crisis de corto plazo y hasta 14.4 por ciento en caso de que ocurra una recesión prolongada.
El organismo multilateral refirió que la pérdida acumulada del empleo registrado ante el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) de los meses de marzo y abril ya suma a 3.3 por ciento y se prevé que la tasa de desempleo tendrá un incremento importante.
La capacidad de recuperación de la economía determinará la velocidad con la que se normalicen en el futuro las dimensiones clave del mercado de trabajo, pero se asume que llevará mucho tiempo, subrayó.
Mencionó que en la crisis global de 2008-2009 la tasa de desempleo tardó hasta el 2016 en volver al nivel que tenía antes de la crisis y muchas variables de calidad del empleo, mucho más que eso.
KA
