Petróleos Mexicanos (PEMEX) destacó que uno de sus principales objetivos es producir 1.2 millones de barriles de combustibles en 2024, impulsado por la entrada en funcionamiento de dos importantes instalaciones: la refinería Olmeca y una coquizadora en la refinería de Tula.
Cabe señalar que, hasta mayo del presente año, la producción de combustibles entre el Sistema Nacional de Refinación y Deer Park ascendió a 678 mil barriles diarios; no obstante, para finales de este año, se espera el aumento de la cifra, con lo que alcance los 806 mil barriles diarios, en el proyecto intervendrá la Refinería Olmeca, misma que actualmente opera con un tren, pero se espera, sume dos trenes más en noviembre, con lo que contribuiría con 77 mil barriles diarios adicionales a la producción de combustibles.
Ante ello, el director general de PEMEX, Octavio Romero Oropeza, ha expresado su confianza en que la producción de barriles de crudo continuará en aumento y se espera superar el millón de barriles diarios el próximo año.
Asimismo, la adquisición de la refinería de Deer Park por parte de PEMEX y la mayor utilización de la capacidad del Sistema Nacional de Refinación permite casi duplicar la producción de gasolinas, diésel y turbosina en el país en comparación con 2018, cuando se producían 359 mil barriles diarios.
Este logro es significativo en el contexto de la política energética del gobierno de México. En el Quinto Informe de Gobierno, el presidente Andrés Manuel López Obrador destacó que en 2018 México importaba en promedio 900 mil barriles diarios de gasolina, lo que representaba el 80% del consumo nacional. Sin embargo, se prevé que, para finales de 2023, las importaciones se reduzcan a 250 mil barriles diarios, equivalente al 20% del consumo.
También se resaltó que procesamiento de crudo mostró un aumento significativo. De 2013 a 2018, hubo una disminución del 50%, pero en los últimos 5 años, se logró un incremento del 78%, en gran parte gracias a la contribución de Deer Park.
Además, las plantas coquizadoras en construcción en las refinerías de Tula, Salamanca y Salina Cruz desempeñarán un papel crucial en la transformación del combustóleo en diésel y gasolina, lo que contribuirá a la autosuficiencia en el suministro de combustibles.
FGR
