En 2019, Petróleos Mexicanos (Pemex) tuvo un superávit financiero de 26.4 mil millones de pesos y un desendeudamiento de 29 mil millones, informó su director general, Octavio Romero Oropeza, ante diputados.
“Pemex el año pasado por primera vez no se endeudó y este año, tampoco, a pesar del COVID-19”, agregó en su comparecencia ante las comisiones unidades de Energía e Infraestructura de la Cámara de Diputados, con motivo del análisis del Segundo Informe de Gobierno.
Destacó que Pemex continúa siendo la entidad productiva más grande del país y el principal contribuyente de la hacienda pública.
“Es una unidad generadora neta de ingresos, no es una unidad generadora de gasto, es de ingreso, totalmente a lo que los detractores dicen”, dijo.
Refirió que los ingresos totales de Pemex fueron de 1.9 billones de pesos, que equivale a 9.5 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB), y tan sólo de enero a septiembre la empresa le entregó a la hacienda pública casi 490 mil millones de pesos.
“Concretando ideas: Petróleos Mexicanos no recibe recursos presupuestarios del Gobierno federal, salvo las eventuales aportaciones por 46 mil millones (de pesos) que en este año representan el 0.75 por ciento de total, y es para el proyecto específico de la refinería Dos Bocas”, añadió.
Así, refirió, Pemex es un generador neto de recursos del gobierno federal y el 100 por ciento de los proyectos de inversión para 2020 se realizan con recursos propios que la empresa genera, con excepción de la nueva refinería Dos Bocas, la cual es financiada con recursos del gobierno federal.
Romero Oropeza señaló que en 2018 recibió a Pemex con una deuda de 106 mil millones de dólares, pero ahora es de 104 mil millones de dólares, lo que significa dos mil millones de dólares menos.
fgr