El sector empresarial señaló que es importante insistir en un entorno que facilite la participación de las empresas en el país, tanto las nuevas como las ya establecidas, en la economía formal; además, de que es necesario implementar una política pública que tenga como propósito dinamizar y alcanzar un mejor desempeño de la economía, indicó el Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP), en su nota semanal.
De acuerdo con las últimas previsiones de crecimiento económico, se espera que el PIB de México cierre en 1.5 por ciento para 2024, cifra menor que la expectativa que se tuvo de 3.0 por ciento en los Preciterios 2025 que la Secretaría de Haciendo y Crédito Público (SHCP) previó; para 2025, también se espera un porcentaje similar, “evidentemente la economía no mejora y no hay señales de que lo haga en el corto plazo”, indicó el organismo de investigación del Consejo Coordinador Empresarial (CCE).
Ante ese panorama, la Iniciativa Privada busca la participación en la formalidad, en donde haya “un ambiente de expectativas claras de crecimiento y supervivencia, además de propiciar una percepción positiva y de certidumbre del ambiente de negocios”.
Porque ante la falta de políticas públicas que promuevan y permitan la participación en la economía formal, la informalidad ha representado una opción para que las personas y las empresas consigan sus ingresos.
“En 2023, la economía informal generó casi la cuarta parte del Producto Interno Bruto (PIB), el porcentaje más alto de al menos los últimos 14 años. Pero su productividad es baja. Ocupa a más de la mitad de la población y genera sólo una cuarta parte de la producción del país”.
El nearshoring ha puesto al país en un puesto privilegiado a nivel mundial, “sin embargo, las oportunidades que ofrece este proceso no son eternas”, por eso se debe considerar que la relocalización puede beneficiar prolongadamente a la población, pero para que suceda debe existir un Estado de derecho, “una mayor protección de los derechos de propiedad y un sistema financiero más desarrollado”.
Añadió que el país no se cuenta con un Estado de derecho sólido, y tampoco se tiene una cobertura amplia de los derechos de propiedad, lo que podría ocasionar que sea un destino poco atractivo.
El organismo sostuvo que hay ejemplos donde los países que, a pesar de estar distantes de Estados Unidos, son atractivos para el nearshoring, como Chile, que tiene una mayor consolidación del Estado de derecho y protección de los derechos.
