Durante el año pasado, la Comisión Federal de Electricidad (CFE) registró mermas económicas importantes de alrededor de 12 mil 563 millones de pesos por el robo de energía eléctrica a través de los denominados “diablitos”.
En conferencia, Guillermo Nevárez, director de CFE Distribución, detalló que, de manera general, la empresa productiva del Estado registró un daño económico total de 54 mil 845 millones de pesos, de los cuales 32 mil 560 millones de pesos fueron pérdidas no técnicas o robos.
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De esa cifra, 80 por ciento son robos, delincuencia organizada, asentamientos irregulares y resistencia civil; en tanto, el 20 por ciento restante son fallas de medición y de proceso, con un monto de 6 mil 613 millones de pesos.
Nevárez detalló que tienen conocimiento de empresas que evaden el verdadero costo de su consumo de electricidad, aunque no detalló los nombres, pero puntualizó que ya tienen denuncias penales. “Si hay empresas importantes que han intentado robar energía, pero les hemos cobrado. En el industrial durante 2019 recuperamos 48 millones de pesos en cinco servicios”, dijo.
Agregó que trabajan en los mercados de la Ciudad de México, como San Cosme o La Merced, los cuales se incendiaron el año pasado por cortos circuitos provocados por establecimientos informales que se “colgaban” de los cables de luz.
“Trabajamos en 358 mercados y hemos desconectado prácticamente cinco mil servicios ilícitos dentro de los mercados, lo cual provocaba el alto riesgo de calentamiento de los conductores, de chispazos y con lo que se vende por ahí, pues la posibilidad inmediata de propagación de fuego, como sucedió en San Cosme, en La Merced, en otros”, detalló.
Además, señaló que para detener el problema de los “diablitos” están sensibilizando y forzando “con todo respeto” a la gente que está irregular, para que contrate su servicio; además, insisten para que las autoridades los ayuden, pues admitió que hay poblaciones donde sí hay red y otras donde no, que las consideran como” diablitos”, con la diferencia de que hay que construir la debida infraestructura y conseguir los recursos para hacerlo.
“Se resuelve invirtiendo, no hay de otra fórmula en el mundo. Los japoneses, por ejemplo, traen pérdidas sobre 4.0 por ciento en general, pero 100 por ciento de su infraestructura es subterránea, con circuitos cortos. Aquí en la Ciudad de México los circuitos son chiquitos, a lo mejor el más largo de los que podamos contabilizar en el área urbana, probablemente kilómetro y medio o dos, con cargas altamente concentradas, ahí las pérdidas”, mencionó el director de CFE Distribución.
Por el robo de energía, la CFE presentó mil 147 denuncias durante 2019. Aun cuando han tenido dificultades para ingresar algunas zonas o centros comerciales, Nevárez destacó que al cierre del año pasado lograron regularizar a 202 mil 058 usuarios, lo que se traduce en 239 mil millones de pesos en pagos por el servicio de energía eléctrica.
También explicó que los asentamientos irregulares, como colonias populares, sobre todo en áreas suburbanas, en áreas rurales, donde por el propio crecimiento de la ciudad, se va quedando atrás la infraestructura, invaden terrenos, construyen colonias y demás, que luego con el apoyo del propio Fondo Universal para Electrificación con las aportaciones de los municipios de los estados, del Instituto Nacional de Pueblos Indígenas y en comunidades indígenas, vamos teniendo la obligación de regularizarlos para poder incorporarlos al sistema comercial, si están bajo un sistema de red de distribución.
A fin de combatir las pérdidas de energía, la CFE prevé atenderán 3.6 millones de anomalías en equipos, se modernizarán 1.3 millones de medidores y se fortalecerá el proceso comercial en casi 94 mil 580 rutas comerciales.
