El Banco de México (Banxico) decidió por unanimidad reducir en 25 puntos base la tasa de interés a 4.00 por ciento, tras haberla mantenido en dos ocasiones previas en 4.25 por ciento.
La tasa de interés referencial no se ubicaba en ese nivel desde el 29 de junio de 2016, cuando subió de 3.75 por ciento a 4.25 por ciento, pero… dejando a un lado lo técnico, aquí te explicamos qué es y cómo te afecta este anuncio del banco central.
De acuerdo con el Banxico, la tasa de interés es el costo que debes de pagar por el dinero que se te presta mediante instrumentos financieros como tarjetas de crédito, crédito hipotecario o automotriz e incluso cuentas de ahorros.
Entonces, si el Banco de México fija su tasa de interés en 4.00 por ciento, ese es el porcentaje anual que cobrará a los bancos por prestarles dinero, que a su vez, hacen lo mismo contigo.
La tasa de interés también es lo que el banco central paga a los inversionistas por invertir su dinero en los instrumentos de deuda gubernamentales, como son los Cetes.
Para fijar este indicador uno de los objetivos del Banco de México toma en cuenta tres aspectos: la inflación, el tipo de cambio y el alza en el precio de la gasolina.
¿Cuales son las consecuencias de una tasa de interés alta?
- El crédito es más costoso, por lo que es factible que ya no desee comprar y posiblemente no va a querer solicitar recursos de préstamo para adquirir vivienda, vehículos etc.
- Para las empresas también es más costoso financiarse, lo que se puede traducir en menor rentabilidad.
- Se detienen las tendencias de inflación.
- La rentabilidad de los productos de ahorro aumenta.
¿Consecuencias de una tasa de interés baja?
- Resulta más barato endeudarse, lo que incentiva al consumo.
- Los ahorradores ven menos recompensado sus ahorros.
- Incentiva a la inversión y crecimiento de las empresas.
- Ayuda al crecimiento de la economía, sin embargo, puede generar tendencias inflacionistas
