Con las reformas a la Ley de la Industria Eléctrica y a la de Hidrocarburos se dio un golpe importante a la confianza de inversionistas chinos, porque varias empresas de esta nación tienen proyectos en México, aseveró Sergio Ley López, presidente de la Sección Asia y Oceanía del Consejo Empresarial Mexicano de Comercio Exterior, Inversión y Tecnología (COMCE).
En videoconferencia de prensa, el diplomático expresó que las reformas impulsadas por el Presidente Andrés Manuel López Obrador tuvieron un impacto entre el empresariado chino, quienes no tienen certeza de lo que pasará en el sector energético.
“Hay una cierta desconfianza del medio empresarial chino. El golpe desconcertante para la inversión china fue la reciente legislación en cuanto a la industria eléctrica y la industria energética, puesto que hay varias empresas que habían invertido en granjas eólicas que las tienen en estos momentos paradas, otras están en litigios y otras plantas de producción de energía eléctrica en paneles solares”, destacó.
Asimismo, consideró que con la desaparición de organismos que daban apoyos en la participación de empresas en el extranjero, como ProMéxico que fue extinguido por la actual administración, se dejó de apoyar a las firmas para darse a conocer en el extranjero, principalmente a las Pequeñas y Medianas (Pymes).
"FALSA ILUSIÓN CON RELOCALIZACIÓN DE EMPRESAS"
A pesar de que las autoridades federales aseguraron que con el conflicto entre Estados Unidos y China diversas firmas buscarían salir del mercado asiático para instalarse cerca del vecino del norte, una oportunidad para México; Sergio Ley López consideró que fue “una falsa ilusión”.
Comentó que muchas de las empresas que se establecieron en China se van a quedar en este país, porque les interesa contar con un una población de mil 300 millones de personas con una clase media creciente, que en estos momentos se estima en 400 millones de personas.
Además, expuso que entre 25 y 30 empresas se han movido, sobre todo entre San Diego y Tijuana; pero son empresas maquiladoras con la facilidad de trasladarse a otros puntos si el clima de inversión no les conviene.
“El mayor ganon de este empuje para relocalizar las fuentes de suministro de estos bienes pues va a ser Vietnam. Los países del sudeste asiático tienen incentivos para la inversión extranjera. Nosotros, con razón, hemos tratado de no manejar incentivos para la inversión extranjera, porque los incentivos deben ser para todos iguales”, dijo.