Hay indicadores que parecen dar señales positivas

Relocalización es una realidad, dice OCDE

Señala que es una promesa, pero también una realidad, pero para que el país se beneficie de sus posibles efectos favorables y fortalezca, con ello, el crecimiento económico, debe impulsar reformas

Organización para la Cooperación Económica y el Desarrollo Económicos
Organización para la Cooperación Económica y el Desarrollo Económicos Foto: Especial

El nearshoring o relocalización de empresas a México es una promesa, pero también una realidad, pero para que el país se beneficie de sus posibles efectos favorables y fortalezca, con ello, el crecimiento económico, debe impulsar reformas, consideró la Organización para la Cooperación Económica y el Desarrollo Económicos (OCDE).

El economista para México de la OCDE, Alberto González Pandiela, afirmó que hay evidencia “anecdótica” y algunos indicadores que parecen dar señales positivas del nearshoring en el país.

En videoconferencia sobre las “Perspectivas económicas de la OCDE”, destacó que están repuntando algunos componentes de la inversión en México, sobre todo en maquinaria y equipo, lo que son los primeros indicios de que el nearshoring ya es una realidad en el país.

“Es una promesa (el nearshoring), pero también es una realidad y también hay evidencia anecdótica de que la demanda de parques industriales, sobre todo en las regiones fronterizas, está relativamente alta”, subrayó.

No obstante, el economista de la OCDE afirmó que un reto clave pendiente para México es fortalecer el crecimiento económico, para lo cual puede aprovechar el reacomodamiento de las cadenas de valor.

Para que México se beneficie de los posibles efectos favorables de este fenómeno, resaltó González Pandiela, la OCDE recomendó tres reformas claves para el país.

La primera, dijo, es ampliar las bases tributarias y un mejor aprovechamiento de algunos impuestos, como el predial, lo que permitiría contar con recursos para impulsar la inversión en infraestructura y la educación, pero a la vez mantener el compromiso que tiene con la prudencia fiscal.

La segunda, es agilizar regulaciones a nivel estatal y municipal, así como reducir costos para crear empresas, lo que fomentaría la formalidad, apoyaría a las pequeñas y medianas empresas (Pymes), para también se puedan beneficiar de los aspectos positivos de este fenómeno.

La tercera reforma es fortalecer el acceso al mercado laboral, sobre todo de las mujeres, a través de redes de cuidado y de educación temprana para que tengan mejores condiciones para trabajar, anotó el economista para México del organismo internacional.