La balanza comercial de México empieza a reflejar ya una recuperación de la economía más rápida de lo esperado, con el superávit histórico que registró en junio de este año, resultado del repunte de las exportaciones y las importaciones tras el derrumbe que tuvieron en abril y mayo, cuando resintieron los efectos más agudos de la pandemia de Covid-19.
El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) informó que en el saldo de la balanza comercial en junio reportó un superávit de cinco mil 547 millones de dólares, luego del déficit de tres mil 523 millones de dólares en mayo y de tres mil 987 millones de dólares en abril pasado, los meses de mayor confinamiento, según cifras originales.
Así, en los primeros seis meses de este año, la balanza comercial acumuló un superávit de dos mil 659 millones de dólares, aunque menor en 17.81 por ciento respecto al mismo periodo de 2019.
El organismo reportó que las exportaciones mexicanas mostraron un repunte de 75.6 por ciento en junio pasado, tras el derrumbe de abril y mayo, de 36.9 y 21.7 por ciento, respectivamente, los meses de mayor impacto de la pandemia.
Esta mejoría fue resultado de alzas mensuales de 76.93 por ciento en las exportaciones no petroleras y de 49.67 por ciento en las petroleras en junio, con cifras ajustadas por estacionalidad.
A su vez, las importaciones mostraron un aumento mensual de 22.2 por ciento en junio pasado, con series ajustadas por estacionalidad, tras hundirse los dos meses de confinamiento, en 21.3 y 18.7 por ciento en abril y mayo, respectivamente.
El avance de las importaciones se derivó de crecimientos de 23.08 por ciento en las importaciones no petroleras y de 11.08 por ciento en las petroleras, de acuerdo con información oportuna de comercio exterior.
En tanto, el valor de las exportaciones de mercancías alcanzó 33 mil 076 millones de dólares en junio de 2020, con lo cual cayeron 12.8 por ciento respecto a igual mes de 2019, tras el derrumbe histórico de abril y mayo, de 40.9 y 56.7 por ciento anual, respectivamente.
Este desempeño obedeció sobre todo a las exportaciones petroleras, que retrocedieron 35.6 por ciento anual en junio, luego de caer 66.4 y 66.8 por ciento anual en abril y mayo, respectivamente.
El Inegi apuntó que las exportaciones no petroleras bajaron 11.6 por ciento anual en junio pasado, desde 39.4 y 56.3 por ciento, en abril y mayo pasado.
Refirió que el valor de las importaciones de mercancías en junio pasado fue de 27 mil 530 millones de dólares, monto que implicó una contracción de 22.2 por ciento por descensos de 18.2 por ciento en las importaciones no petroleras y de 55.4 por ciento en las petroleras.
Por tipo de bien, observaron caídas anuales de 43.6 por ciento en las importaciones de bienes de consumo, de 19.6 por ciento en las de bienes de uso intermedio y de 12.3 por ciento en las de bienes de capital.
El subgobernador del Banco de México (Banxico), Jonathan Heath, afirmó que las cifras de comercio exterior marcan el inicio de una recuperación, promovida fundamentalmente por la reactivación de mercado de exportaciones, gracias a la reapertura de las fronteras y el apoyo de un tipo de cambio favorable.
“Para que esta recuperación se convierta en un regreso robusto de la actividad económica, necesitamos primero que el consumo de los hogares empiece a crecer en los siguientes meses y posteriormente que se active la inversión fija bruta”, publicó en Twitter.
Los analistas de Banorte Juan Carlos Alderete y Francisco Flores calificaron como positivo el reporte de la balanza comercial, pues muestra una recuperación económica más rápida de lo esperado en junio, incluso estimaron que añade ligeros riesgos al alza a su estimado Producto Interno Bruto (PIB) del segundo trimestre, de una caída de 19.5 por ciento anual.
“Creemos que este resultado es favorable para la dinámica de corto plazo, al menos hasta julio. No obstante, debemos mostrar cautela ya que sigue existiendo incertidumbre sobre el impacto del reciente aumento de casos en Estados Unidos, que podría tener un efecto adverso en el comercio”, agregaron.
El analista económico de Monex, Marco Daniel Arias, estimó que el superávit de junio refleja el dispar comportamiento de exportaciones e importaciones, “así, la recuperación que se ha puesto en marcha con la reactivación del comercio global es parcial, por lo que su impacto en el crecimiento será limitado”.
La directora de Análisis Económico y Financiero de Banco Base, Gabriela Siller, dijo que el superávit comercial fue resultado de una mayor recuperación de la demanda externa sobre la interna tras la apertura parcial de la economía local.
- El dato: Las actividades no esenciales en México pararon en abril y mayo a causa del Covid-19, pero el 1 de junio reactivaron la construcción, minería e industria automotriz, al declararse esenciales.
fgr