En una maniobra no vista desde hace 28 años y como parte de sus esfuerzos por frenar la inflación que continúa en ascenso, la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed) decidió incrementar en 75 puntos base la tasa de interés referencial de ese país para dejarla en un rango de entre 1.50 y 1.75 por ciento.
“Claramente el aumento de 75 puntos básicos de hoy es inusualmente grande y no esperaría que los movimientos de este tamaño sean comunes, pero desde la perspectiva de hoy, un ajuste de 50 o 75 puntos básicos parece más probable en nuestra próxima reunión”, sostuvo en conferencia Jerome Powell, presidente del organismo.
La puerta que aceleró el fuerte incremento en la tasa que realizó el banco central al precio del dinero, se dio luego de que la semana pasada la inflación se disparara a 8.6 por ciento en mayo, según el Índice de Precios al Consumidor de Estados Unidos, —una cifra por encima de las expectativas de los analistas, incluso por encima de lo anticipado por el consenso—.
La decisión de Política Monetaria de este miércoles se suma a otras dos que se realizaron en meses pasados, como parte de la estrategia por anclar los niveles de inflación y llevarlos a su objetivo de 2.0 por ciento.
La decisión de la Fed de llevar la tasa a un rango de 1.50 a 1.75 por ciento se esperaba alcanzarlo hasta 2023; sin embargo, con los datos revelados ayer, se puede observar que el banco central está dispuesto a reaccionar ante los cambios que afecten el panorama previsto y, por lo tanto, será complicado tener una expectativa de cuánto podría incrementarse, lo cual genera volatilidad en los mercados, sostuvo un análisis de Monex.
Efectos en México
Los efectos para México tras el anuncio de la Fed a sus tasas son varios. Expertos y el propio Banxico ya hablan de una posible desaceleración en la economía del país, afectando principalmente la exportación y hasta las remesas.
Por un lado, el aumento de la tasa provocaría que los instrumentos de ahorro en dólares, como los bonos del tesoro, se vuelvan más atractivos por los rendimientos que generan, causando así que los inversionistas prefieran moverse hacia el dinero estadounidense.
Otro efecto que contemplan los especialistas es que disminuyan las exportaciones mexicanas hacia Estados Unidos, lo cual sería negativo para nuestro país si se considera que 80 por ciento de las exportaciones mexicanas tienen como destino el vecino del norte.
“Con este incremento sube el costo del dinero, y con esto se espera que venga una desaceleración que pudiera verse reflejado en las exportaciones que envía México hacia Estados Unidos y un poco en las remesas que envían los connacionales acá”, sostuvo Gabriela Siller, directora de Análisis Económico-Financiero de Banco Base.
En suma, con esta decisión el mercado ya descuenta que la siguiente semana el Banco de México (Banxico) suba su referencia en 75 puntos base, lo cual incrementaría el costo de los créditos que existen en México, pues la tasa de referencia al cierre de 2022 será de 9.5 por ciento, añadió.
Sobre este tema, Victoria Rodríguez, gobernadora del Banxico, señaló que se analizará de manera detallada la decisión de la Fed en la reunión de política monetaria del próximo 23 de junio; sin embargo, Rodríguez Ceja consideró que la economía nacional podría enfrentar un proceso de desaceleración a medida que aumenten las tasas de interés, aunque aclaró que sus fundamentos macroeconómicos la diferencian de otros países emergentes.
Durante la presentación del Reporte de estabilidad financiera de junio del 2022, la gobernadora de Banxico dijo que el apretamiento de las condiciones monetarias y financieras a nivel global podría llevar a condiciones de mayor volatilidad.
“Y es de esperar que la economía pudiera enfrentar un proceso de desaceleración económica a medida que aumenten las tasas de interés y en su caso podría haber algún impacto en la actividad económica en México”, añadió.
Peso y la BMV aplauden decisión de la Reserva
Tras la decisión de la Reserva Federal de Estados Unidos de incrementar la tasa de referencia, el peso mexicano y la bolsa de valores reaccionaron de manera positiva.
La moneda mexicana cotizaba en 20.2141 por dólar casi al final de la jornada, con una apreciación del 1.77 por ciento frente al precio de referencia de Reuters del martes, luego de cuatro sesiones de pérdidas, encaminándose a anotar su mejor jornada desde el 9 de marzo, pues en las cuatro sesiones previas el peso se debilitó alrededor de 5.21 por ciento.
Desde la sesión del viernes cuando se publicó la inflación de Estados Unidos en 8.6 por ciento anual durante mayo, el mercado comenzó a descontar la posibilidad de un incremento a la tasa de interés de 75 puntos base, lo que ocasionó un fortalecimiento adelantado del dólar estadounidense, que tiró al peso mexicano.
En el caso de la Bolsa Mexicana de Valores (BMV), su principal referencial accionario, el S&P/BMV IPC aumentaba alrededor de 0.37 por ciento a 48,344.97 puntos al cierre de la sesión, siendo ésta la mayor ganancia desde el 27 de mayo, además de ser la segunda sesión de ganancias en las últimas 13 sesiones.
Destacaron las ganancias de Genomma Lab, con un aumento de 4.98 por ciento; Walmex, con 3.60 por ciento y Bimbo, con 3.10 por ciento.
Inflación dejará a 400 millones en hambruna
Las presiones inflacionarias a nivel mundial generarán que se llegue a una crisis global que no se había observado, con más de 400 millones de personas en el mundo en peligro de caer en condiciones de hambruna, advirtió María Fernanda Garza, presidenta de la International Chamber of Commerce (ICC).
“El problema que vemos es que están en riesgo 400 millones de personas en el mundo de caer en condiciones de hambruna. El Banco Mundial estima que por cada punto porcentual que el alimento sube, 10 millones de personas en el mundo caen en pobreza extrema”, sostuvo la primera mexicana en presidir el organismo internacional.
En conferencia, sostuvo que la manera de contrarrestar los efectos del llamado “impuesto de los pobres” es mantener los mercados globales abiertos y las cadenas productivas de alimento operando, pues así se pueden eliminar los altos precios.
“Las cadenas de valor globales han ayudado a mantener a la inflación bajo control durante las últimas décadas, porque cuando se organiza la producción de una manera estructurada ganamos eficiencia y eso mete un freno a la inflación”, sostuvo.
Por ello, afirmó que las mejores medidas que pueden tomar los Gobiernos para enfrentar los altos precios al consumidor es abrirse más al comercio.
Señaló que la pandemia de Covid-19, la guerra entre Rusia y Ucrania y más recientemente, el incremento de la transportación vía marítima hasta siete veces más que hace tres años, han sido los fenómenos que han incidido más fuertemente en el rompimiento de las cadenas de valor y han afectado principalmente a las pequeñas y medianas empresas.
Recordó que desde 2021 existía un problema con los alimentos por las sequías y ahora también por los confinamientos debido al Covid-19, tanto que la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) informó que en 2021 ya habían subido los precios de los alimentos en 20 por ciento; sin embargo, la guerra de Rusia en Ucrania ha presionado más a las cadenas de valor y ha generado que los precios se hayan incrementado aún más.
Detalló que la guerra ha afectado al mundo porque los países en conflicto son importantes jugadores en los mercados de granos y energía, al proveer 24 por ciento del trigo y 73 por ciento del aceite de semillas de girasol en 2020.
Garza hizo un llamado a restablecer las cadenas de valor globales, pues son las únicas que han ayudado a mantener baja la inflación por décadas.
El presidente de la ICC México, Claus von Wobeser expresó el organismo jugará un rol fundamental para reorganizar el comercio a nivel mundial, donde “pronto el papel ya no va a ser necesario, sino realizar un comercio realmente digital, generando nuevos procesos legislativos en los países para hacer un intercambio más ágil, sin necesitar el envío de un conocimiento de embarque por alguna empresa de mensajería de un país a otro, para que se pueda procesar una importación o exportación a través de una aduana, es decir, que toda la documentación sea de forma electrónica”.
Refirió que en México están en pláticas con la Secretaría de Hacienda para impulsar el comercio electrónico y la digitalización, porque ayuda a evitar la corrupción. Cuando las cosas se dan sin papeles, es mucho más transparente el proceso y se quiere una implementación digital, y por la pandemia hubo un avance de 15 o 20 años en el tema del comercio electrónico.