Aun cuando se registró un incremento en el número de puestos formales tras la reforma del outsourcing, de 779 mil 368 puestos laborales de junio del 2021 respecto a junio del 2022, el número de puestos informales duplicó esa cifra y se observó un incremento de un millón 500 mil puestos de trabajo en esta condición, incrementando así la tasa de informalidad de 55.4 por ciento en 2021 a 55.8 por ciento en 2022.
En entrevista con La Razón, Héctor Márquez Pitol, presidente de la Asociación Mexicana de Empresas de Capital Humano (AMECH), consideró que, no se puede señalar que el aumento en la informalidad sea sólo producto de la reforma a la subcontratación; sin embargo, mencionó que sí se sobrevaloró y se pensó que eliminaría ese tipo de problemáticas.
“No podemos decir que sea producto sólo de la reforma, todo depende de lo que se analice... Escuchábamos que con ella se resolverían todos los problemas como la informalidad y observamos que no fue así”, destacó.
Héctor Márquez Pitol, señaló que observando de manera general los números del Inegi, se observan algunas tendencias como el hecho de que está aumentando el número de personas que se autoemplean o van por cuenta propia (200 mil de diciembre del 2021 a junio del 2022).
Sin embargo, si se contrasta con los datos de que la informalidad ha disminuido en 1.7 millones que, es una cantidad importante, no se logra determinar en dónde se empleaó el resto de las personas, ya que la disminución de informalidad no se está traduciendo en una mayor formalidad; de hecho, en el periodo se registraron 200 mil puestos menos formales.
“Desde mi punto de vista este año han cambiado las estadísticas, lo cual nos impide observar el movimiento de la gente”.
Para el directivo, las personas que migran a la informalidad buscan aumentar principalmente sus ingresos, generando el principal problema de la informalidad que es la elusión de impuestos.
En el caso de los empleadores, las cifras van en aumento, lo que quiere decir que es positivo, pues más empleadores están reconociendo a sus trabajadores; sin embargo, existe una discrepancia entre las cifras que da a conocer el Inegi y las que presenta el IMSS.
En junio del 2022 había 2 millones 993 mil empleadores observados por el Inegi; sin embargo, ante el IMSS sólo había un millón 064 mil patrones, apenas 36 por ciento de lo registrado por el Inegi.
Eso quiere decir que “los otros dos millones de patrones eluden su responsabilidad patronal y hacen una elusión de pagos; es decir, sólo el 36 por ciento de lo que registra el IMSS, el resto eluden pagando en efectivo, por honorarios, por asimilados, por cooperativa, por sindicato u por otro canal”.
“Hay éxitos en la reforma, pero también hay partes dolorosas que hay que reconocer si queremos ir para adelante. Creo que la reforma debe buscar que se pueda hacer más a detalle los reglamentos, por sectores para que sean más los beneficiados de tener un empleo digno y formal y cada vez menos los empleadores que evaden sus responsabilidades.
Salarios bajos, el detonante principal. La reforma buscaba ser más justos con los trabajadores; sin embargo, no atacó el tema de los sueldos bajos, que por orden de prioridades era de los temas más importantes.
“Lo que vino a agravar más la situación fue la pandemia, porque se perdieron muchos empleos, entonces la gente buscó cómo generar recursos; aunado a lo anterior, el mayor culpable son los salarios tan bajos que hay en el país”, lamentó.
Actualmente el promedio de salarios en México es de 14 mil 500 pesos, un sueldo bajo si se compara con otros países, por lo que la gente prefiere irse hacia la informalidad para no pagar impuestos. “Entonces ése es el principal problemón, ese es el cáncer que yo digo que tenemos en materia laboral”.
Aunque en los últimos tres años se ha registrado un incremento importante en materia salarial, el aumento sólo fue al salario mínimo, por lo cual aquellas personas que ganan más de un salario, no tuvieron ese beneficio.
En suma, a quienes sí se les reflejó el incremento, otros factores como la inflación mermaron ese beneficio. De acuerdo con el directivo, a la gente se le incrementó el salario en 5.0 por ciento, pero esa cifra ya está rebasada si se compara con la tasa de inflación de 8.16 por ciento en la primera mitad de julio.
Ante esto, el presidente de la AMECH, dice que la reforma del outsourcing llegó en un momento crítico en diversas materias, principalmente en la económica.
Por último, apuntó a que, si se revisan los datos de informalidad durante los últimos 10 años, por entidad, los estados del norte del país disminuyeron su tasa de informalidad; pero los del sur, como Oaxaca o Guerrero la incrementaron.
