El valor real de la producción de las empresas constructoras se desplomó 12 por ciento en diciembre de 2019 respecto al mismo mes del año previo, su mayor caída desde 2006, cuando inició el registro de este indicador, con lo cual ligó 18 meses con caídas a tasa anual, con cifras desestacionalizadas, informó el Instituto Nacional de Estadísticas y Geografía (Inegi).
El organismo reportó que las remuneraciones medias reales fueron menores en 3.5 por ciento, el personal ocupado total bajó 1.3 por ciento, y las horas trabajadas disminuyeron 1.2 por ciento durante diciembre de 2019, con relación al mismo mes de un año antes.
De acuerdo con los resultados de la Encuesta Nacional de Empresas Constructoras (ENEC), el valor de la producción generado por las empresas constructoras registró una caída en términos reales de 0.8 por ciento en diciembre del año pasado frente a noviembre, con base en cifras desestacionalizadas, lo que significó el décimo primer retroceso mensual consecutivo.
El dato. Cuando la economía entra en recesión, la construcción tiende a disminuir más que otras actividades, mientras que en tiempos de auge sus tasas de expansión son mayores.
El personal ocupado total descendió 0.3 por ciento, mientras que las horas trabajadas y las remuneraciones medias reales se mantuvieron sin variación en el último mes de 2019 respecto al mes precedente, con series ajustadas por estacionalidad, añadió.
Considerando cifras originales, el valor real de la producción en la industria de la construcción reportó un cambio de 11.9 por ciento real anual en diciembre de 2019, al sumar 29.5 miles de millones de pesos constantes.
Con ello, durante 2019 el valor de la producción generado por las empresas constructoras se contrajo en términos reales anuales 8.1 por ciento.
De acuerdo con Banco BASE, la contracción anual promedio de la construcción en 2019, es la mayor caída en un año, e incluso superior a la observada durante la Gran Recesión, cuando el sector se contrajo en promedio 6.0 por ciento.
De acuerdo con el libro Lo que indican los indicadores de Jonathan Heath, la industria de la construcción juega un papel significativo en la economía al proveer bienes de capital fijo indispensables para la creación de infraestructura básica (puentes, carreteras, puertos, vías férreas, plantas de energía eléctrica, presas y obras de irrigación), así como obras de vivienda, escuelas, hospitales y edificaciones para recreación y esparcimiento (hoteles, cines y teatros).
El documento refiere que la construcción representa 66.1 por ciento de la Inversión Fija Bruta (IFB) y 20 por ciento de la actividad industrial del país, lo cual la convierte en uno de los sectores más importantes de la economía.
Con la importancia que tiene la construcción en la actividad industrial, su comportamiento es muy procíclico, es decir, magnifica el comportamiento de la actividad económica en su conjunto.
Un análisis de Citibanamex refiere que la construcción continúa debilitándose, principalmente por el componente público; y es que en los últimos meses se ha observado que la construcción pública siguió disminuyendo drásticamente, con una caída de 19.3 por ciento en todo 2019.
El promedio para 2019 es una contracción anual de 8.0 por ciento, la mayor caída en un año, e incluso superior a la observada durante la gran recesión, cuando el sector se contrajo en promedio 6.0 por ciento.
Por tipo de obra, las mayores disminuciones se observaron en obras de agua, riego y saneamiento; electricidad y telecomunicaciones; y transporte y urbanización.
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