Con datos ajustados por estacionalidad, el personal ocupado del sector manufacturero disminuyó 0.2 por ciento a tasa mensual en febrero de este año, sumando así ocho meses a la baja, informó el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
Con base en la Encuesta Mensual de la Industria Manufacturera (EMIM), en el mes de referencia, a tasa anual y con cifras ajustadas por estacionalidad, el personal ocupado total descendió 1.5 por ciento, siendo su sexo mes de caída, hecho que no se veía desde 2020.
Al respecto, el Grupo financiero Banco Base destacó que esta contracción es “algo que no ocurría desde la Gran Recesión en el 2008. En estos 8 meses de contracciones, el índice acumula una disminución de 1.87 por ciento”.
En un análisis, detalló que a tasa anual sólo siete de los 21 sectores de manufacturas registraron un crecimiento en los últimos 12 meses. El empleo en industrias como la fabricación de equipo de computación, comunicación, medición y de otros equipos, componentes y accesorios electrónicos cayó 9.19 por ciento; lo mismo en fabricación de prendas de vestir (-9.13 por ciento); fabricación de insumos textiles y acabado de textiles (-8.93 por ciento); curtido y acabado de cuero y piel, así como fabricación de productos de cuero, piel y materiales sucedáneos (-8.80 por ciento), entre otros.
En contraste sectores como el de la industria química crecieron en el número de su personal ocupado en 2.11por ciento; de igual forma, la industria de las bebidas y del tabaco (1.82 por ciento); la industria del papel (1.29 por ciento); la fabricación de equipo de transporte (1.28 por ciento); y las industrias metálicas básicas tuvieron un aumento en empleo de 1.19 por ciento.
Además, el Inegi indicó que las horas trabajadas en el segundo mes del año aumentaron 0.4 por ciento respecto a enero. No obstante, la tasa anual registró una disminución de 1.7 por ciento, lo que significó “cinco meses consecutivos a la baja, algo no visto desde la pandemia de Covid-19”, destacó Banco Base.
En cuanto al índice de remuneraciones medias reales pagadas, es decir sueldos, salarios y prestaciones sociales, registró un aumento anual de 4.9 por ciento, acumulando 14 meses consecutivos de crecimiento.
“Esta tasa es la menor desde febrero del 2023, señal de que los aumentos salariales están en desaceleración. Este indicador es relevante ya que mide las remuneraciones en razón de las horas trabajadas, lo cual puede ser considerado una medida de productividad laboral en el sector industrial. No obstante, también es importante tomar en cuenta las condiciones del mercado laboral general, que actualmente cuenta con una tasa de desempleo históricamente baja, lo cual pone presión al alza en los salarios”, agregó Banco Base.
Asimismo, los únicos sectores en los que las remuneraciones por hora trabajada muestran caídas son la industria de las bebidas y del tabaco con una reducción de 1.60 por ciento, la fabricación de productos metálicos con menos de 1.22 por ciento y la fabricación de accesorios, aparatos eléctricos y equipo de generación de energía eléctrica (-0.18 por ciento).
