La Inversión Extranjera Directa (IED) destinada a la producción de equipo de transporte en el país captó mil 821.9 millones de dólares en el primer trimestre del año, 20.1 por ciento más que el año pasado. Esto representó la mejor cifra desde hace cuatro años, según datos de la Secretaría de Economía (SE).
El principal motor de la fabricación de unidades de autotransporte tuvo origen en la producción de automóviles y camiones, que acaparó 57 por ciento del total; con mil 039.7 millones de dólares. Esta cifra triplicó lo recibido en el primer trimestre de 2020, cuando el impacto de la pandemia de Covid-19 afectó las cadenas de valor.
Los demás componentes de la IED en la producción automotriz estuvo compuesta por autopartes, con 662.5 millones de dólares; equipo aeroespacial, con 88 millones; y 26.8 millones de equipo ferroviario.
Tatiana Clouthier, secretaria de Economía, anotó que hace falta que se den a conocer los esfuerzos que realizan de la mano con la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA) en la atracción de inversiones.
Sin embargo, mientras que nuevas compañías anuncian su interés en el país, otras deciden salir del mercado por la falta de certidumbre. Tal es el caso de Volvo Trucks, fabricante de camiones, que decidió retirarse del país en cuanto a la venta de unidades, por la falta de certeza de la industria por la NOM-044 y la falta de disponibilidad de Diésel Ultra Bajo Azufre (DUBA).
Ante los problemas que representa para la renovación de la flota, los integrantes de la industria solicitaron modificar la NOM-044 de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) para que el uso de DUBA sea voluntario y no obligatorio, luego de que la disponibilidad del combustible no es suficiente.