Viva Aerobus alzó la mano para ser otra aerolínea mexicana que vuele desde y hacia el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA) a partir de marzo del próximo año, refrendó Juan Carlos Zuazua, director de la compañía; no obstante, analistas alertan que sin planeación la nueva terminal podría acabar como el Aeropuerto de Toluca.
En conferencia, el directivo sostuvo que ellos ya habían mostrado interés en volar desde el día uno en esa terminal, por lo que aseguró que han trabajado de forma permanente con la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) para este fin.
“Viva Aerobus fue la primera línea aérea que anunció su intención de volar desde Santa Lucía desde el día uno, hemos estado en trabajo permanente con la Sedena y hemos seguido muy de cerca la evolución de la construcción y el desarrollo tanto del aeropuerto como del espacio aéreo”, señaló el director de la primera aerolínea que aterrizó en el AIFA en febrero.
Aunque no dio mayor información sobre los vuelos que operará, el director de Viva Aerobus mencionó que serán nacionales los que podrían despegar desde Santa Lucía, y se definirán las rutas cuando la autoridad informe más sobre subsidios y tarifas a ofrecer en esa terminal aérea.
El miércoles, Volaris hizo lo propio e informó que sus nuevas rutas de Cancún y Tijuana saldrán de la terminal que se encuentra en Zumpango, Estado de México.
Ante estas declaraciones, expertos coinciden en que si bien las aerolíneas que son consideradas como de bajo costo han apostado por esta nueva terminal —incluso cuando las mismas empresas aéreas habían dudado del proyecto—, se debe en parte por una estrategia para continuar su expansión; sin embargo, aseguran que si no se hace con precisión y análisis, la terminal podría acabar “en el abandono”, como pasó con el Aeropuerto de Toluca.
Por un lado, Fernando Gómez Suárez, analista del sector aeronáutico, explicó a La Razón que aún no se vislumbra si el nuevo integrante del Sistema Aeroportuario Metropolitano será nacional o internacional; no obstante, si es este último modelo estará compitiendo con el Aeropuerto Benito Juárez de la Ciudad de México, lo que terminaría por ser un conflicto en la distribución del mercado aéreo.
En este sentido, señaló que eso ya se observó con el Aeropuerto de Toluca, que se planteó como una terminal aérea internacional, que se volvió atractiva para empresas como Volaris o Viva Aerobus debido a los incentivos que les otorgaba en ese momento y al término de éstos, optaron por mudarse definitivamente al AICM.
“Eso ya sucedió con el Aeropuerto de Toluca cuando estas mismas aerolíneas son de tarifas promocionales, no de bajo costo, y esas aerolíneas volaron en Toluca, pero al terminar los incentivos, como menor Tarifa de Uso Aeroportuario (TUA) y mayores créditos para el pago de combustible y de servicios, dejaron de otorgar tarifas promocionales que a la larga y en un descuido de la autoridad se mudaron al AICM, se abandonó Toluca al grado de que el número de operaciones es inexistente… eso puede pasar con Santa Lucía”.
En esto coincidió Carlos Torres, también analista en aviación, quien aseguró que si bien estos anuncios han estado sustentados por los buenos resultados de las compañías aéreas y su apetito por expandirse más allá del principal aeropuerto del país, también se debe contemplar que con el término de los incentivos, el apetito por seguir operando se disipe.
Por ejemplo, Volaris aseguró que tienen un mercado potencial de 4.8 millones de clientes que pueden ser atendidos desde el AIFA, entre ellos, señaló Torres, están aquellos de los estados de Hidalgo, Estado de México, Querétaro, Puebla y alrededores, quienes generarían una nueva demanda y podrían llenar ese mercado; sin embargo, aun así no se descarta llegar a una situación similar a la de Toluca.
“La visión es llegarle a este segmento de la población que hoy por hoy no están haciendo uso de los servicios aéreos, lo que puede pasar es que muy probablemente al arranque se pueda llenar ese mercado, pero también, como ocurre con el Aeropuerto de Toluca o con el de Palenque, se pueda observar una carencia de aerolíneas comerciales. El mercado no se equivoca”, dijo.
TARIFAS EN VILO
La empresa Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles es la encargada de la operación de la terminal y es la misma que tendrá que dar a conocer los incentivos y los planes tarifarios.
Carlos Morán, subsecretario de Comunicaciones y Transportes de la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT), señaló a principios de septiembre que la empresa tendría que dar a conocer los planes tarifarios hacia finales de ese mes, pues a las aerolíneas les tomaría entre tres y ocho meses programar comercialmente un vuelo.
