El sector financiero de nuestro país registra un bajo nivel de crédito para las empresas, lo cual inhibe la inversión en buena parte del sector productivo nacional, donde predomina la presencia de microempresas, que a pesar de ser las mayores generadoras de empleo, no reciben financiamiento.
En 2013, al aprobarse la reforma financiera, se instituyó promover la competencia en el sector para ampliar su penetración y cumplir con dos objetivos fundamentales: que haya más crédito y que sea más barato. Sin embargo, la mayor parte del crédito en México está enfocado en la vivienda y en el consumo que, aunque impactan al crecimiento a corto plazo, no generan el bienestar de largo plazo que impulsa la inversión productiva.
Por tal razón, el IMEF en conjunto con la Amexcpa (Asociación Mexicana de Capital Privado) y la Bolsa Mexicana de Valores (BMV), unen esfuerzos para difundir en todo el país las alternativas y beneficios de diversas formas de financiamiento, incluyendo el capital privado y capital de riesgo, así como la emisión de acciones y de deuda.
En este sentido y conscientes de que las oportunidades de crédito para las micro, pequeñas y medianas empresas pueden potenciar el crecimiento de nuestra economía, se recomienda que antes de contratar algún financiamiento, es importante comprender que cierto nivel de apalancamiento, además de disminuir el costo de capital de la operación de la empresa, no implica riesgos adicionales y sí incrementa el valor, haciendo el negocio más rentable para sus accionistas y más atractivo para la inversión.
Bajo este contexto, el financiamiento bursátil se presenta como una opción real y eficaz para atender necesidades financieras de las empresas mexicanas con visión de trascender y poder tener acceso a él, toda empresa constituida legalmente en México o en el extranjero.
Para el IMEF, son diversas las ventajas del financiamiento bursátil y una de ellas es la tasa de interés, es decir, el mercado de valores ofrece tasas de financiamiento más atractivas que las de otras fuentes, lo cual permite a las pequeñas y medianas empresas institucionalizar procesos y reducir sus costos.
¿Cómo participar en este mercado? Es importante tener un plan de negocios claro, que muestre un crecimiento histórico sostenible y con utilidades positivas, así como con potencial hacia el futuro. Una operación con prácticas de Gobierno Corporativo y procesos formales, con un consejo de administración activo y con consejeros independientes, son un complemento que brinda confianza a los inversionistas y que hace más atractiva a la empresa.
Tenemos suficiente evidencia que constata que el desarrollo financiero incrementa la resiliencia de un país e impulsa el crecimiento económico a través de una movilización de los ahorros y la mejor asignación de recursos, entre otros.
Optar por nuevas fuentes de financiamiento y de manera específica, por el financiamiento bursátil, permite impulsar la formalización de la fuerza productiva del país, además de consolidar y fortalecer la estructura financiera de las empresas, maximizando su competitividad y acercando nuevas oportunidades de negocio.
