Lo que opinen los demás está de más… Ayer se conmemoró una de las fechas más emblemáticas para la comunidad LGBT, el Spirit Day, un día que busca hacer conciencia sobre el respeto que merece cualquier persona, más allá de su orientación sexual.
Desafortunadamente, en el país los chistes de mal gusto y bromas pesadas son habituales, pero nadie ríe al saber que hoy México se ubica como la segunda nación con el mayor índice de crímenes de odio hacia ese grupo.
La realidad es que si bien hemos avanzado en materia legislativa, aún persisten importantes barreras culturales y, también dentro de las estructuras organizacionales, que no permiten una mayor apertura.
Datos de la “Encuesta sobre Diversidad y Talento LGBT en México”, desarrollada por la ADIL al mando de Francisco Robledo, revelan que un preocupante 56% de quienes forman parte de ese colectivo, no cuentan con la confianza para salir del clóset en sus centros de trabajo, por temor a un despido injustificado, acoso laboral o un freno de su avance profesional.
Lo anterior resulta lógico si consideramos que 27% de ellos declara haber sufrido alguna agresión verbal o física, por su condición sexual en sus oficinas.
Vive y deja vivir, ama y deja amar… En ese contexto, existen gremios donde la retrógrada homofobia está más arraigada. Actualmente, los servidores públicos LGBT tienen mayor probabilidad de estar en el clóset, que quienes trabajan en el sector privado.
Pero incluso, en los corporativos aún queda todo por hacer. Apenas 63 empresas en México cuentan con certificaciones de inclusión y diversidad. De éstas 80% son transnacionales, es decir que las empresas mexicanas no tienen aún estas acciones en el radar...
El tesoro al final del arcoíris… El tema tiene un enorme peso económico. Ari Rodríguez, especialista de Nielsen, destaca que de acuerdo con el estudio “El Consumidor LGBT+ mexicano”, algunos rubros ven en ese segmento una buena oportunidad de crecimiento.
Particularmente, entre los intereses destacan el cine, teatro y la lectura.
Asimismo, el documento muestra que 21% de ellos realiza compras online, cifra que se eleva al 61% en niveles socioeconómicos altos, 7% más que el resto de la población.
El 61% coincide en que está dispuesto a adquirir marcas que apoyen la inclusión con acciones contundentes.
El asunto no es poca cosa. Hoy ese grupo representa un auténtico músculo laboral cercano a los 5.5 millones de trabajadores. En otras palabras, 10% de la población económicamente activa (PEA), es lesbiana, gay, transexual o bisexual.
Se calcula que el impulso de dicho sector, mediante acciones para garantizar la no discriminación podría representar un empujón al PIB cercano a los 80 mil millones de dólares anuales. Así que todo por ganar…
Moody’s recorta PIB a 0.5% este año
Va para largo… La actividad económica en América Latina se mantiene débil. Estimaciones de la calificadora Moody’s, que comanda Alberto Jones Tamayo, ubican el crecimiento de las 6 principales economías de la región en 0.7% este año y 1.7% en 2020, muy por debajo de la tendencia de crecimiento global.
En el caso específico de México, las proyecciones se recortaron desde 1.2% a 0.5% para este 2019, que se antoja para el olvido…