Los acelerados contagios por el Covid-19 que se han registrado desde el inicio de esta semana y que tan sólo ayer llegaron a seis mil 288, originan alarma no solamente entre la población tanto de la Ciudad de México como de otras entidades federativas, sino también entre el personal médico de hospitales públicos y privados, porque la pandemia sigue sin ser “domada” y día a día causa más muertos.
Las cifras de ayer lo confirman: el número de fallecimientos fue de 23 mil 377; de sospechosos, 59 mil 106; confirmados activos, 24 mil 387 y casos acumulados 191 mil 410, según el reporte dado a conocer anoche en Palacio Nacional por funcionarios de la Secretaría de Salud.
DE ESTO Y DE AQUELLO…
Escala y sube de tono el cada vez más abierto enfrentamiento del Presidente López Obrador contra el INE y las réplicas del consejero presidente de este organismo, Lorenzo Córdova, quien empezó a endurecer sus respuestas a las reiteradas andanadas que desde las mañaneras lanza el Ejecutivo federal al que busca descalificar antes de que se inicie siquiera el año electoral, en septiembre.
Después de que con el pretexto de “vigilar” que en las elecciones federales y estatales del 6 de junio de 2021 no haya “fraude”, López Obrador anunció que será “guardián” de esos procesos, Córdova la respondió que “no tiene vela en ese entierro” y que el único responsable de organizar y vigilar los comicios es el INE.
La construcción del Tren Maya, una de las obras prioritarias del sexenio lopezobradorista, parece seguir con mal fario porque además de generar una polémica que no acaba, una juez federal suspendió definitivamente las obras en el tramo correspondiente a Palenque, el municipio chiapaneco en el que el Presidente tiene un rancho, escriturado a sus hijos.
La agrupación Indignación, Promoción y Defensa de los Derechos Humanos así lo informo y agregó que el amparo fue solicitado por la comunidad indígena Ch’ol para que inicialmente se realicen labores de mantenimiento en las vías existentes, pero que no se lleven a cabo nuevas modificaciones, lo que seguirá vigente hasta que un Tribunal Federal decida revocarla en semanas venideras.
Con todo y la magnitud del sismo registrado ayer con epicentro en La Crucecita, pequeña población cercana a Huatulco, no se presentaron mayores consecuencias que el lamentable deceso de seis personas en Oaxaca y algunos daños en edificios que están afectados desde anteriores movimientos telúricos en la Ciudad de México.
Por fortuna, fue un sismo oscilatorio de 7.5 grados, no trepidatorio, lo que evitó otra tragedia como las ocurridas en 1985 y 2017, que causaron miles y centenares de muertes y la destrucción de la capital de la República y ciudades y poblaciones del interior.