Luego de la elección de los cuatro nuevos consejeros del Instituto Nacional Electoral, cuyos nombres anticipamos en este espacio, y de que algunos diputados de Morena proclamaron que fueron los que ellos propusieron, el líder de su bancada, Mario Delgado, los paró en seco al señalar que fue un acuerdo por unanimidad de los grupos parlamentarios y que “ninguna fuerza política influyó en el proceso”.
Poco antes de que se pusieran a votación en el pleno del recinto de San Lázaro los nombres de los nuevos integrantes del organismo electoral, algunos morenistas intentaron madrugar a la oposición al alardear que ellos habían propuesto a Carla Humphrey Jordan, Norma Irene de la Cruz, José Martín Fernando Faz y Uuc-Kib Espadas Ancona y eran “suyos”.
DE ESTO Y DE AQUELLO…
El anunciado proyecto de ley para reformar el Sistema de Pensiones que busca mejorar las que recibirán los trabajadores al momento de su retiro, fue presentado ayer por el Presidente Andrés Manuel López Obrador en un acto en el que estuvieron dirigentes obreros y empresariales y los líderes de las Cámaras de Diputados y de Senadores.
Destacó la presencia del presidente del Consejo Coordinador Empresarial, Carlos Salazar Lomelín, al que le abrieron las puertas de Palacio Nacional luego de que se quejara de que se las cerraron cuando presentó un plan de apoyo a las empresas ante la crisis económica provocada por el Covid-19, que el Ejecutivo derivó a la Secretaría de Economía.
Esta vez, para significar la presencia del dirigente empresarial, el Presidente dijo que si se trata de poner estrellitas, yo diría que le correspondería antes que a nadie, la realización de esta nueva propuesta, a Carlos Salazar Lomelín: “él ha venido trabajando durante un año, incluso hemos tenido diferencias, nos distanciamos por la sana distancia, sin embargo, él continuó trabajando”, dijo.
Fue el secretario de Hacienda, Arturo Herrera, quien explicó que con ese proyecto se buscará pasar de mil 250 semanas obligatorias que hoy se exigen a 750 semanas para obtener una pensión garantizada y que no se incrementarán las aportaciones de los trabajadores pero sí las patronales que se elevarán de 5.15 a 13.8 por ciento.
A casi una semana de que el exdirector general de Pemex, Emilio Lozoya Austin, llegó extraditado a México como en aquel viejo cuento del monje loco, nadie sabe si realmente está enfermo u oculto, si ha rendido declaración alguna ni ante quién o qué ha dicho y todo ha quedado en la narrativa presidencial mañanera.
Repetir que “ha dado a conocer nombres” de presuntos involucrados en el caso Odebrecht —que se asegura que ya prescribió—, es generar temor a quienes directa o indirectamente, por distintas razones tuvieron alguna relación con el exfuncionario.