A más de un año del primer caso registrado de Covid-19, aún no es concluyente en dónde y cómo apareció el paciente cero, pero la investigación de la Organización Mundial de la Salud en China avanza hacia una posible respuesta.
Conocer el origen de la pandemia causada por el SARS-CoV-2 es clave para evitar una nueva emergencia sanitaria con esta magnitud que ha mantenido durante meses al mundo entero en una crisis sanitaria, social y económica sin precedentes. Es por ello que la OMS envió un equipo de 14 expertos internacionales a Wuhan, lugar donde se registró el primer contagio, para tratar de determinar el origen del coronavirus.
La investigación no ha sido sencilla para la expedición de científicos ante las fuertes restricciones y controles del gobierno socialista chino que, inclusive, ha cerrado las puertas a la prensa internacional y resguarda celosamente la información sobre dicha investigación.
A pesar del control gubernamental, los expertos de la OMS ya estuvieron en un punto clave de la indagatoria, el mercado de Huanan, en Wuhan. Al principio de la pandemia se había presumido que era el lugar en donde el virus había saltado de los animales a los humanos, por ser un mercado en donde se comercializan todo tipo de especies. Sin embargo, los expertos creen que ese mercado sólo sirvió como un espacio de transmisión masiva y no exactamente el lugar en donde surgió el virus.
Una segunda visita de importancia fue la que realizaron los investigadores al Instituto de Virología de Wuhan. Aquí, la comitiva internacional fue recibida por la reconocida doctora Shi Zhengli, quien aseguró que se hicieron pruebas para descartar una fuga que tuviera relación con la aparición del nuevo coronavirus. Este instituto también es clave, porque los científicos que ahí trabajan investigan las distintas cepas de coronavirus; inclusive fue centro de declaraciones tensas entre los gobiernos de China y de Estados Unidos, ya que el mandatario estadounidense Donald Trump aseguraba que el virus había escapado de este laboratorio.
El grupo de investigadores de la OMS tardó más de un año en poder entrar a territorio chino ante la negativa del gobierno de ese país y, según algunos expertos, esta demora prolongada para realizar las investigaciones podría impedir que se obtengan datos relevantes para conocer el origen de la pandemia. Sin embargo, no todo está perdido y los expertos de la OMS han encontrado datos que no se habían publicado con anterioridad gracias a la información compartida por los científicos chinos, la investigación de campo y las entrevistas con los afectados en zonas clave, según declaró Peter Daszack, uno de los científicos que forma parte de esta comitiva de la organización sanitaria.
Aunque hasta ahora no hay una resolución concluyente sobre el origen del SARS-CoV-2, la investigación del grupo de expertos en China continúa y no descartan la posibilidad de que el nuevo coronavirus haya salido de un laboratorio, así como otras teorías que se mantienen vigentes ante la falta de exactitud para saber el origen del virus. Al gobierno chino le incomoda mucho esta investigación, pero es un gran paso que aceptara una exploración para determinar el origen de la pandemia y con ello dar confianza a la población del mundo de que no se repita algo parecido con una nueva cepa.