Hay cuando menos cuatro eventos para considerar que la empresa codirigida por Bernardo Gómez y Alfonso de Angoitia retoma la senda del crecimiento luego de la parálisis económica de 2020, como el hecho de que las ventas de contenidos (publicidad, venta de canales, programas y licencias) aumentaron 1.9% entre el tercer y cuarto trimestre del año pasado, y la seria posibilidad de que la publicidad asociada a contenidos suba alrededor de 4% en 2021.
Los contenidos y publicidad fueron de las actividades más afectadas por el cierre de las actividades productivas que obligó la pandemia de Covid-19, lo cual se observa en las ventas anuales en tal rubro de Televisa (-7%)…, pero que empezaron a repuntar al final de 2020, así como las regalías derivadas de Univision (8.8%) tras un oportuno y mutuamente conveniente acuerdo de contenidos entre la firma que preside Emilio Azcárraga y la que encabeza Wade Davis.
Pero mientras la publicidad pasaba por momentos azarosos, la audiencia de la compañía creció 20.1%. Este segundo y fundamental evento se apuntaló con un intenso programa de reducción de costos que permitió ahorros por 2.2 mil millones de pesos…, así como a una reconducción de inversiones hacia la división Telecom de Televisa donde, apoyados con mil millones de pesos, Izzi, al mando de Salvi Folch, y SKY, dirigida por Alex Penna, reportaron 21.9 millones de suscriptores al agregar 1.76 millones de unidades generadoras de ingresos.
La combinación de todo ello generó un tercer evento expresado en una caja de 1,800 millones de dólares disponibles en la tesorería de Televisa.
Y sí, en la sesión con analistas, los directivos de la televisora señalaron el cuarto evento: en las reuniones con anunciantes se obtuvo un acuerdo para la venta del Up-Front 2021 con un aumento de un dígito, el cual se especula rondará un 4% este año.
Lo que dice Nexoil. En cuanto a la denuncia anónima que llegó al diputado Ricardo Francisco Exome que señaló a la empresa Nexoil de participar en una red de huachicol de contrabando, el apoderado legal de la firma encabezada por Guillermo Pazarán, envió una carta al legislador para asegurar que no participan en esa red que, conforme a la denuncia, le permite ganar a esa firma 500 millones de pesos diariamente por evadir el pago de impuestos de importación, al Valor Agregado y Especial de Producción y Servicios. El representante legal de la firma, Francisco Áureo Acevedo, dice que están dispuestos a que se abra cualquier línea de investigación sobre la conducta que se les atribuye y reta a sus detractores a mostrar una sola factura que acredite que Nexoil importa hidrocarburos y sus derivados de EU. “Las acusaciones son totalmente falsas, estamos en la total disponibilidad de brindar la información que sea necesaria a las autoridades para que se nos deslinde por completo de esas acusaciones”, señala.
¿Quién paga el golpe? El informe de la Auditoría Superior de la Federación, a cargo de David Colmenares, no es sólo enunciativo: es el reclamo de uno de los poderes de la nación para que la SFP, de Irma Eréndira Sandoval, exija a las entidades públicas que recibieron observaciones en su ejercicio presupuestal, que expliquen, subsanen, reparen o judicialicen los daños al patrimonio nacional. ¿Quién justificará legalmente y responsabilizará de los 331 mil millones de pesos que costará cancelar el NAIM? Gerardo Ferrando firmó oficios de suspensión de obras y desagües, ordenó liquidar a contratistas y vender chatarra y cascajo; lo corrieron poco después de que se fuera de la SCT su exjefe, Javier Jiménez Espriú. Ojo, no hubo decreto presidencial u otra autoridad federal que justificara por “utilidad pública” la cancelación del proyecto de Texcoco a fin de asumir el daño patrimonial más grande de la historia del país. Veremos que sucede.
