Casi a diario en Palacio Nacional, el Presidente Andrés Manuel López Obrador repite que “la vida pública tiene que ser más pública”, que su Gobierno no será “tapadera de nadie” y que la lucha es “contra la corrupción”.
Incluso se ha pronunciado por la desaparición del Instituto Nacional de Transparencia, porque dice que su Gobierno es transparente y rinde cuentas al pueblo.
Sin embargo, como en la Secretaría de la Función Pública piensan y operan muy diferente al discurso presidencial, decidieron “testar” —palabra que desconocía el Presidente hasta hace unos meses— una investigación sobre los sobornos que la empresa brasileña Odebrecht entregó a Emilio Lozoya Austin.
Les platico de qué se trata: la auditoría interna 01/810/2019 contiene detalles de la investigación en la que se encontró que “entre 2010 y 2014, Odebrecht realizó sobornos por alrededor de 10.5 mdd a funcionarios del Gobierno de México para asegurar contratos de obras públicas. Odebrecht logró beneficios”.
Peeeero, también hay una investigación más sobre el encubrimiento y la omisión de investigar estos sobornos por parte del Área de Quejas, Denuncias e Investigaciones de la Unidad de Responsabilidades de Pemex y de Pemex Transformación Industrial. Esta auditoría es de 2019, ya cuando la 4T tenía las riendas del poder.
Y es que, a pesar de que esta indagatoria es abierta, la Secretaría de la Función Pública, que encabeza Roberto Salcedo Aquino, negó el acceso a la auditoría que un ciudadano solicitó vía transparencia.
Tras un recurso de revisión, el Inai le ordenó entregar una versión pública y la dependencia federal lo hizo, presentó 256 hojas de la auditoría testada, es decir, tachoneada y borrada. Son párrafos y párrafos completos en color negro, un documento en el que lo único legible es el número de auditoría, el número de páginas y los nombres de los auditores.
¿Qué datos eliminó y tachoneó la SFP para que no los veamos? Entre otras cosas, el informe de auditoría, el oficio de notificación, nombre del servidor público, nombre del denunciante, quejoso y los hechos materia del expediente.
En el documento hay algunas líneas que dan cuenta que se oculta información importante y pública, por ejemplo: cargo en la dependencia, área de adscripción y periodo, número de expediente, hechos y conductas, etc…
La Función Pública también eliminó la información y los detalles del expediente sobre el procedimiento administrativo sancionador a Luis Alberto de Meneses Weyll, director general de la empresa ODEBRECHT INGENIERÍA Y CONSTRUCCIÓN INTERNACIONAL DE MÉXICO, S.A. DE C.V.
Tachoneado, rayado, borrado. Así es como la 4T entiende la transparencia.