Europa y el resto del mundo resienten los problemas, cada vez más evidentes, de las cadenas de suministro mundial impactadas por distintos fenómenos, pero principalmente por los estragos de la pandemia de Covid-19.
Sin duda seguimos percibiendo las consecuencias de una pandemia que nos ha hecho reordenar el mundo entero. Actualmente se vive una crisis visible que afecta la producción, el envío y el abastecimiento de productos por muchos factores que se suman a los impactos de la pandemia.
La salida del Gran Bretaña de la Unión Europea, la falta de contenedores y transportes y el cierre de grandes almacenes en China son factores que han afectado las cadenas de suministro en Europa, pero que al final impactan en otras partes del mundo como México.
El desabasto que genera esta problemática pone en riesgo la recuperación de la economía mundial y es un factor clave que afecta la subida de precios por el aumento en la demanda, lo que pone en mayor riesgo a países con un mayor índice de pobreza como las naciones latinoamericanas.
Europa sufre por falta de transportistas que muevan la mercancía y, como en otras partes del mundo, la falta de contenedores para la transportación marítima es ya una pieza clave en el desabasto mundial que podría empeorar según expertos. A esto se suma los problemas de la industria de transporte de mercancías en China que se ha visto también afectada por el cierre de uno de los puertos más importantes en esta región.
La producción de automóviles es un claro ejemplo que dibuja este rompimiento en las cadenas de suministros, ya que las piezas de los vehículos suelen importarse de países como China o México, en donde la mano de obra es más barata. Al no haber materiales suficientes, se dejan de producir estas piezas y toda la producción se frena, afectando la compra y venta de vehículos que puede tardar varios meses en traer a una tienda automotriz algún modelo que se quiera adquirir.
Se acercan las fechas importantes para las compras de fin de año y aquí es cuando podremos darnos cuenta qué tan afectado está el mercado y las cadenas de suministro al no encontrar un producto que queramos adquirir para un regalo de navidad, por ejemplo.
Sin duda lo más preocupante son los productos alimenticios, los cuales no pueden escasear si no se quiere enfrentar graves problemas sociales.