La contratación de 500 médicos cubanos “especialistas” por parte del gobierno del Presidente Andrés Manuel López Obrador, con el pretexto de que en México existe un “déficit” de ellos y el anuncio de que se aplicará la vacuna anti-Covid Abdala de ese país a menores de edad, sin cumplir la tercera fase ni la autorización para ello, generó enérgica protesta de colegios, federaciones y asociaciones médicas que ha ido en aumento en los últimos días y en preparativos de movilizaciones en esta capital y en otras del interior de la República.
Como si eso no bastara, en su mañanera de ayer, el mandatario tildó a los estudiantes de Medicina de “retrógadas y egoístas” porque durante la pandemia, la UNAM los mandó a su casa en vez de colaborar con las autoridades del sector salud en sumarse a enfrentar el Covid, lo que provocó que en redes sociales se desatara una andanada de críticas en su contra, recordándole que su gobierno no quiso dotar de medicamentos a niños con cáncer y se rehusó a que fueran vacunados.
DE ESTO Y DE AQUELLO…
Ante una incontenible inflación que el mes pasado llegó a 7.8 puntos y después de que por mayoría la Junta de Gobierno del Banco de México subió la tasa de interés a 7 por ciento, el gobierno emitió ayer un decreto que elimina por un año el pago de aranceles a la importación de diversos productos de la canasta básica, en un nuevo intento de frenarla y evitar que afecte a las clases populares y afecte las expectativas de crecimiento económico.
Desde el momento mismo en que la Secretaría de Economía publicó a principios de este mes una nueva verificación vehicular para vehículos con cuatro años de antigüedad, a partir del primero de noviembre, comenzaron las protestas ciudadanas a través de las redes sociales por esa segunda sorpresiva revisión con un queja ciudadana común: “El Gobierno busca sacar dinero hasta de debajo de las piedras”.
Es su mañanera de ayer, el Presidente López Obrador declaró que no tuvo conocimiento de ese acuerdo de la dependencia de la que es titular Tatiana Clouthier, por lo que ordenó revisarlo, al admitir que en su gobierno todavía hay pensamiento conservador, tecnocrático, que se tiene que hacer a un lado, “porque no vamos a seguir bolseando a la gente”.
Más “por no dejar”, las dirigencias de partidos de oposición, han presentado sus iniciativas de reforma electoral frente a la que el Ejecutivo federal remitió a la Cámara de Diputados que la rechazaron tajantemente por lo que como Morena y sus aliados no tienen mayoría ni en San Lázaro ni en el Senado, será imposible que sea aprobada en el próximo periodo de sesiones.
