Arribó Biden al AIFA y, a CDMX, en “La Bestia”

PULSO POLÍTICO

*Esta columna expresa el punto de vista de su autor, no necesariamente de La Razón. larazondemexico

Conjeturas, versiones y rumores aparte, la decisión final del presidente de Estados Unidos, Joe Biden, de arribar la tarde de ayer al aeropuerto Felipe Ángeles, a pesar de que la Casa Blanca había confirmado que lo haría en el Benito Juárez de la CDMX, ocurrió luego de la recaptura de Ovidio Guzmán, hijo de El Chapo y de la aceptación del gobierno del Presidente Andrés Manuel López Obrador de que nuestro país reciba mensualmente a 30 mil migrantes centro y sudamericanos devueltos por el gobierno estadounidense por estar ilegalmente en su país.

Si esos hechos fueron los que a última hora cambiaron la decisión del lugar en que iba a descender el Air Force One, ya se sabrá en su momento y despejará las dudas de los que hoy muchos tienen, coinciden y hasta aseguran, qué fue lo que motivó modificar lo anunciado desde Washington, tras el arresto por segunda ocasión del señalado principal introductor de fentanilo a Estados Unidos y la aceptación de Biden de llegar al AIFA y trasladarse a la capital, acompañado de su anfitrión, en “La Bestia”, el superblindado vehículo que suele utilizar el ocupante en turno de la Casa Blanca.

DE ESTO Y DE AQUELLO…

La sorpresiva recaptura de Ovidio Guzmán, la madrugada del jueves cerca de Culiacán, por parte de un grupo de élite del Ejército que logró ubicarlo y lo obligó al uso de helicópteros artillados que tanto criticara López Obrador cuando no era Presidente por considerar que se utilizaban para realizar masacres, como cuando se localizó y dio muerte a un capo del cártel de los Beltrán Leyva en Nayarit.

En contraste con la primera captura del hijo de El Chapo, puesto en libertad por órdenes del Ejecutivo federal por la violencia que desató el Cártel de Sinaloa en varios municipios de ese estado, esta vez también hubo bloqueos, quemas de vehículos y muerte de 29 personas entre militares y sicarios, mientras aquel era trasladado a la CDMX y después al penal mexiquense de “alta seguridad” del Altiplano, donde se le declaró prisión “preventiva” hasta que EU presente documentación para extraditarlo.

El presidente de Estados Unidos se alojó en la zona hotelera de Polanco bajo un impresionante operativo de seguridad por elementos del Servicio Secreto y agencias de inteligencia en coordinación con elementos del Ejército, Guardia Nacional y agentes federales y se espera el arribo, hoy, del primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, para participar hoy y mañana en la Cumbre de Líderes de América del Norte.

En el peor de los momentos para la Jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, se registra un nuevo y grave accidente en una de las líneas del Metro.