“Los pueblos a quienes no se hace
justicia se la toman por sí mismos
más tarde o más pronto”
Voltaire
La justicia es una cuestión que se ha intentado implementar desde el inicio de la historia, el ser humano desde que formó las primeras comunidades enfrentó el dilema de resolver sus conflictos de convivencia, y crecieron cuando se creó la propiedad privada, posteriormente con la creación de las primeras formas de gobierno se tuvo como la principal responsabilidad social.
La justicia se define como la voluntad firme y constante de darle a cada quien lo que le pertenece. En la mitología griega, la justicia la representaba la diosa Temis, y en la romana Iustitia, la del buen consejo, bajo la figura de una mujer con una balanza y un león a los pies, el cual significaba la objetividad y el poder; sin embargo, la imagen que actualmente más representa a la justicia surgió en la Revolución francesa con la representación de una bella mujer con una balanza en una mano y en la otra mano una espada, con una venda en los ojos. La balanza representa la objetividad, la espada la autoridad y la venda en los ojos la imparcialidad, características que debe de tener toda impartición de justicia, donde no debe debe haber diferencia entre ricos y pobres, poderosos y humildes.
La justicia, dice la máxima, debe de ser pronta y expedita, ya que una justicia tardía no es justicia, y debe de ser gratuita, de lo contrario no podría servir a los pobres, quienes son normalmente los que no tienen forma de defenderse, en virtud de que no pueden pagar un abogado y los defensores de oficio, entre su poca preparación y el cúmulo de trabajo, no pueden brindarles una buena defensa.
La justicia como hoy la conocemos, hace unas décadas no existía; sin duda el progreso social nos ha llevado a un avance en la impartición de justicia, pues hasta hace un poco más de un siglo existía la esclavitud en Estados Unidos de América, y en muchos países más, la cual costó guerras y revoluciones el poder erradicarla; también hace apenas unas décadas la discriminación racial estaba justificada en la ley, siendo una de las injusticias que todavía llega a operar, pero en baja intensidad; otra gran injusticia ha sido la discriminación de la mujer, la cual se ha padecido a lo largo de la historia de diversas formas, sin que hasta la fecha se haya erradicado totalmente, pues aún existe en los países musulmanes y en ciertos sectores de la sociedad.
En la actualidad, aún y con todo el progreso social logrado, se presentan injusticias sistemáticas, como es la discriminación social, por cuestiones raciales y socioeconómicas, además de la discriminación de género, por las cuales las mujeres y las comunidades LGTBTTTIQ son quienes más padecen las injusticias por parte de la sociedad y de los órganos del Estado.
Hoy vivimos una época de gran progreso social comparado con el pasado, pero aún hay resistencias para que finalmente podamos hablar de una justicia plena para todos, y desde luego no debemos de perder de vista que el ser humano por naturaleza tiene filias y fobias, y no puede ser ciego ni objetivo en la impartición de justicia, porque a diferencia de la diosa Temis, nuestros jueces son humanos.