En un año, desde que Jane Fraser anunció que Citigroup vendería Banamex, el banco comercial perdió casi un millón de cuentas… y con ello merma rápidamente su participación de mercado frente a sus competidores al desacelerar notoriamente su capacidad en colocación de crédito como en la captación de depósitos del público; Banamex se hace agua, pero aun así Germán Larrea mantiene inamovible su oferta de 7,500 millones de dólares, aunque el banco pierda valor, entre más tiempo pase en lo que concluye el deu dilligence y se concreta la transacción.
Es evidente que el dueño de Grupo México busca separar los riesgos implícitos en la compra, principalmente las contingencias por los litigios que tanto Amado Yáñez como Martín Díaz sostienen contra Banamex a la que acusan de haber sido partícipe directo de la quiebra de Oceanografía. Como ya perdieron todo, resulta improbable que Yáñez o Díaz retiren sus demandas o que puedan sentirse de alguna manera amagados por el Gobierno de Andrés Manuel López Obrador, que ha tomado como propia la bandera de “mexicanizar” lo que fuera el banco más importante del país.
Vaya, mientras el conjunto de la cartera de crédito del sistema bancario aumentó en 2022 en 12.4%, la cartera del banco, a cargo de Manuel Romo, avanzó sólo 5.6%, por lo que su participación de mercado se redujo de 9.90% al 9.30% en cuanto a colocación de crédito se refiere. En tanto que BBVA, que dirige Eduardo Osuna, fue el ganón al aumentar en 15.7%, seguido por Banorte, de Carlos Hank González, con un aumento de 11.8%.
En cuanto a captación, quien mejor capitalizó la incertidumbre que rodeó a Banamex (que también enfrenta falta de inversión en sistemas informáticos, desarrollo de productos y de banca digital), fue Banorte: mientras que la captación total avanzó 9.4%, la del Banco fuerte de México avanzó 12.8%, mientras que la de Banamex sólo creció 6.1%. Y fue BBVA el que tuvo mejor avance en ese contexto de debilitamiento de su competidor.
Tanto HSBC, que lleva Jorge Arce, como Santander, que dirige Felipe García, lograron avances relativos en cartera y captación; pero la caída del gigante también abrió oportunidad de expansión para Scotiabank, Inbursa, Banco Azteca, Banco del Bajío, Banregio, JP Morgan y Afirme.
Considerando la inexorable pérdida de presencia de Banamex, la pregunta obligada es: ¿Larrea está dispuesto a comprar un cascarón de banco, que llegó a valuarse en 15 mil millones de dólares, siempre y cuando maximice el ego y minimice los riesgos?
Llega Festival de las Ideas. Esta semana inicia uno de los encuentros intelectuales y lúdicos más importantes de América: el Festival de las Ideas 2023, lanzado por el Centro Ricardo B. Salinas Pliego, que se efectuará del 9 al 11 de marzo en la ciudad de Puebla con apoyo del gobierno estatal. Los ejes temáticos sobre economía, libertad, innovación, biodiversidad y educación serán abordados por personajes de la talla del cineasta James Cameron, del psicólogo clínico más famoso del mundo, Jordan B. Peterson, y el del experto en innovación y escritor Jeremy Gutsche. La cartelera de expositores es un refrendo del compromiso de Ricardo Salinas Pliego de impulsar a los jóvenes y no tan jóvenes a desafiar su entorno y transformarlo de forma positiva.
Chuléame la MH. Los vecinos de la Miguel Hidalgo estarán de plácemes en breve: el alcalde Mauricio Tabe firmó con la Asociación Nacional de Telecomunicaciones (Anatel), que encabeza Pablo Vidal, y la Cámara Nacional de la Industria Electrónica de Telecomunicaciones y Tecnologías de la Información (Canieti), a cargo de Enrique Yamuni, para iniciar el retiro de cable “muerto” ubicado en varias colonias de esa demarcación. El primer retiro inicia en la icónica Colonia Escandón, descolgando más de 6 mil metros en diversas calles entre ellas la de José Martí, y se proyectan tres polígonos más que abarcarán a once colonias. El convenio consta de cuatro etapas donde Telmex, Total Play, Izzi, Axtel, AT&T, Megacable y Flō Networks deberán, además, de quitar el cable en desuso y tensar los que aún son funcionales. Esta acción se traducirá en una mejor imagen urbana en la demarcación y mejorar la seguridad para peatones y automovilistas, logrado a través de un diálogo respetuoso y constructivo entre las partes a fin de favorecer a la ciudadanía.