Con una sonrisa, un vestido color guinda, del brazo de Manuel Velasco y junto a Alfonso Durazo, llegó el día de ayer Claudia Sheinbaum a las instalaciones del World Trade Center para el evento donde se dieron a conocer las encuestas que la dan como la candidata de Morena a la presidencia.
Claudia Sheinbaum se ha convertido en la Coordinadora de los Comités en Defensa de la Cuarta Transformación. Es el inicio de un hecho histórico. Si las cosas no dan un giro radical, para la contienda presidencial del 2024, dos mujeres se disputarán la presidencia. Muy probablemente tendremos una mujer jefa de las Fuerzas Armadas de México en menos de un año.
Todavía faltan un par de meses para que se registren de manera oficial los candidatos y queda por definir qué sucederá con Movimiento Ciudadano y a quién erigirá de candidato o candidata. Dentro del equipo de Morena, aseguran que les es muy conveniente que para la elección presidencial haya un tercer candidato y que no se polarice el voto entre Sheinbaum y Gálvez. Con un tercer candidato, que por eso es tan importante MC, Claudia requiere menos votos.
Y es que hoy sabemos que Xóchitl Gálvez, quien encabeza el Frente Amplio por México, será con quien se enfrente a Sheinbaum en la boleta electoral.
Si bien Gálvez ha tenido un acenso que nadie esperaba en muy poco tiempo, hoy Claudia Sheinbaum lleva la delantera en las encuestas. Para Claudia, de ganar la Presidencia es muy importante como quedan los equilibrios en ambas cámaras. Y para los resultados del 2024, estas cámaras pueden estar muy divididas.
Recordemos que López Obrador ha sido un Presidente tan poderoso porque tuvo mayoría en los primeros tres años de su Gobierno, que le permitieron pasar las leyes que quiso y que el presupuesto se aprobara sin cambiarle una coma.
Hoy esa unidad no se ve. El proceso de encuestas de Morena tuvo varias controversias. Marcelo Ebrard, el día de ayer, descalificó el proceso y no asistió al anuncio oficial del ganador.
Durante todo el proceso interno, es decir, por 82 días, hubo reclamos y denuncias. Entre los señalamientos estuvieron los apoyos ilegales desde gobiernos estatales, entre ellos, Colima, al cual ya denunciaron ante las autoridades, acusado de desviar fondos para la campaña de Sheinbaum.
También estuvo el tema de los espectaculares y pinta en bardas que hasta este momento nadie se hace responsable de quién los colocó, pero en el que cinco de las seis “corcholatas” están involucradas.
Cita con la historia
Las denuncias las había venido haciendo desde hace semanas, cuando aseguró que con dinero de la Secretaría del Bienestar se estaba operando a favor de Sheinbaum.
Ayer, Malú Micher, representante de Ebrard en este proceso, denunció que no se le permitió el acceso al recinto y que incluso fue golpeada por unos policías, pese a que ella mostró sus acreditaciones.
Horas antes de este hecho, Marcelo Ebrard habló ante los medios externando su preocupación por la serie de irregularidades detectadas por su equipo, incluso, llamó a reponer el proceso aunque él fuera el ganador.
Mientras Ebrard exponía su postura, adentro del World Trade Center, tanto Mario Delgado como Alfonso Durazo, presidente del Comité Nacional de Morena, aseguraban que el conteo se realizaba en calma y con los protocolos establecidos, incluso se hizo el llamado, sin mencionar a Ebrard, para que los aspirantes tuvieran paciencia y esperaran los resultados.
“Fue un proceso muy intenso y hubo una gran participación, una gran movilización con una serie de garantías inéditas, inusuales incluso podríamos decir, para garantizar que ninguna incidencia, ninguna eventualidad, modifique el resultado. Así es que me parece sumamente precipitado que antes de concluir este proceso de recuento de votos haya expresiones de rechazo al mismo”, expresó Durazo.
Desde temprano ayer y en un comunicado, gobernadores y gobernadoras de Morena respaldaron la consulta que definirá al virtual candidato presidencial, donde aseguran que el proceso fue un éxito.
Previo a la entrega de resultados, Mario Delgado narraba que estaban con notarios públicos para dar fe a los hechos y Arturo Durazo aseguraba que las eventualidades no modifican el resultado.
Ahora, con estos resultados de la encuesta, en donde pocas sorpresas hubo, el Presidente López Obrador entregará el bastón de mando a Sheinbaum, pero termina esta elección interna en una ruptura. Un proceso que ha sido muy complicado, donde muchos se sienten traicionados y donde sólo puede haber un ganador.
A partir de hoy, Sheinbaum tiene que ver cómo va a trabajar en su campaña, tratar de solventar las diferencias que hay dentro de Morena, que el proceso tortuoso de estas precampañas no afecte lo que viene.
En la campaña para presidenta, Claudia Sheinbaum no sólo se juega la Presidencia de la República, sino cómo va a ser esa Presidencia. Si no logra el respaldo en las cámaras, el gobernar se le puede hacer difícil, aun ganando la Presidencia.