La llegada de Javier Milei a la presidencia de Argentina ha generado muchas repercusiones sobre todo en América Latina.
Argentina reconfigura la región
Un personaje que prácticamente no existía en la política de ese país hace un par de años ha ganado la presidencia. Sus posturas son de ultraderecha y gana con una diferencia enorme contra el candidato del oficialismo.
El próximo 10 de diciembre, Javier Milei llega a la Casa Rosada y asegura que “los zurdos (los de izquierda) no regresarán al poder”. Milei ganó por el hartazgo de un gobierno populista que ha dejado al 40 por ciento de los argentinos en la pobreza. Llama la atención que el sufragio en favor de Milei se da cuando las personas que votaron por él saben que pueden perder sus apoyos económicos y los subsidios por ejemplo para el transporte o la medicina.
En una entrevista a una señora que llegaba de provincia para llevar a su hija a la clínica le preguntaban que por quién iba a votar y contestó que por Milei. ¿Aunque no le den subsidio al transporte o para el hospital? Y volvió a responder que sí, su voto era para Milei con tal de sacar al kirchnerismo del poder.
Y es que Argentina ha estado sumergido en una crisis económica enorme desde hace años, dentro del partido hasta ahora en el poder ha habido una confrontación enorme sobre todo dentro de su mismo movimiento.
Hoy votan, no por Milei, sino para poder sacar al gobierno populista que pensó que simplemente dando apoyos económicos, a gran parte de la población, se iban a poder mantener en el poder.
Esta elección va a cambiar los equilibrios en América Latina. Para empezar, el Presidente Andrés Manuel López Obrador ha criticado fuertemente a Javier Milei.
En la conferencia matutina de ayer, el mandatario mexicano dijo que “celebraba que con la elección de Argentina haya salido el cobre de personajes como Fox, Calderón, Aguilar Camín y Vargas Llosa”, estos personajes, a quienes el Presidente ve como oposición y les reiteró: “La historia de México es excepcional y por eso la transformación continúa y no tiene marcha atrás, ya que tenemos al 70 por ciento de la población de acuerdo”.
Y es que el actual Gobierno de México ha trabajado bastante parecido a lo que hizo el kirchnerismo, sobre todo pensando que con los apoyos sociales ganarán elecciones. El Presidente Andrés Manuel López Obrador calificó como “facho y ultra conservador” a Milei la semana pasada, cuando aún estaba en campaña política el ahora virtual mandatario de Argentina.
Y hasta el momento de escribir estas líneas, el Presidente López Obrador todavía no se ha pronunciado personalmente sobre la victoria de Milei en Argentina.
La cancillería mexicana sí ha felicitado al presidente electo, “por su triunfo en las urnas”, y le indició su deseo de mantener una “relación constructiva en beneficio de ambos países”.
Pero Milei no se ha quedado callado y ha respondido al mandatario mexicano por sus comentarios indicando que “los chairos son resentidos”, lo hizo durante un par de conferencias de prensa, al igual que lo ha hecho con el presidente de Chile, Gabriel Boric, tanto en entrevistas como en redes sociales, las palabras de Milei fueron ácidas, como cuando dijo que el líder izquierdista chileno era un “empobrecedor”, o que la victoria de Boric en 2021 fue “una noticia espantosa”.
Pese a los descalificativos, Chile fue uno de los gobiernos de la región que felicitó a Milei y le deseó suerte en su nuevo gobierno, como ocurrió con Uruguay, Paraguay y Ecuador.
Otro mandatario que tampoco se ve muy feliz con el triunfo de Milei es Gustavo Petro, de Colombia, quien escribió en la red social X que lamentaba “el triunfo de la extrema derecha al poder; es la decisión de su sociedad”. El mandatario colombiano agregó que “es triste para América Latina y ya veremos... el neoliberalismo ya no tiene propuesta para la sociedad, no puede responder a los problemas actuales de la humanidad”.
Este mensaje tuvo respuesta por parte del presidente Nayib Bukele, de El Salvador, quien le dijo a Petro: “Ahora dilo sin llorar”.
Anteriormente, Bukele y Petro intercambiaron una serie de mensajes en la red social X desde inicios de marzo, después de que el jefe de Estado de Colombia comparará una cárcel para unos 40 mil presidiarios en El Salvador con un “campo de concentración”.
Mientras que Trump escribió en su plataforma Truth Social: “Estoy muy orgulloso de ti”. Hasta fue saludado por ultraderechistas europeos como Santiago Abascal, el líder de Vox en España.
Paradójicamente, el actual presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, hizo una felicitación como país y no a nivel personal, pero el derechista Jair Bolsonaro, expresidente de Brasil, sí lo felicitó a través de redes sociales.
El triunfo de Milei balancea de nuevo el péndulo de la geopolítica en América Latina, pues desde su campaña ha manifestado desacuerdo con algunos mandatarios de la región, lo cual fue evidenciado al momento de reconocer su triunfo.
Además, los intereses se mueven más allá de Latinoamérica, como ocurre con China y su relación con Argentina, debido a que el régimen de Xi Jinping es partidario de las políticas de gobierno del presidente argentino saliente, Alberto Fernández, uno de los hombres emanados del kirchnerismo.
El mismo Javier Milei externó en más de una ocasión que en caso de ganar no mantendrá vínculos políticos con China ni con otro país “comunista”, limitando las relaciones al sector privado.
El distanciamiento entre China y el próximo gobierno argentino podría ser un problema. El sector agroalimentario argentino desempeña un papel destacado en esta relación, con el 92% de las exportaciones de soja del país y el 57 por ciento de sus envíos de carne a China el año pasado. China también ha realizado notables inversiones en el sector energético del país y en su creciente industria del litio.
Además, el país sudamericano cuenta con una línea de swap de divisas con China por un valor de 18 mil millones de dólares, a la que ha recurrido durante la gestión de Sergio Massa, rival de Milei y ministro de Economía, con la finalidad de ayudar a pagar parte de la deuda con el Fondo Monetario Internacional (FMI).
Este estrecho vínculo puede llegar a su fin como puede ocurrir con las relaciones de Argentina y los gobiernos de izquierda de la región de América Latina.
Y así es como se reconfigura el territorio con el triunfo de Javier Milei en Argentina frente a Sergio Massa, actual ministro de Economía del gobierno de Alberto Fernández. Lo que sí queda claro es que en política y elecciones la rueda de la fortuna puede girar cuando menos se espera.
