Una de las personas más activas en la campaña de Claudia Sheinbaum es la joven empresaria Altagracia Gómez Sierra —heredera del emporio que se formó en torno a Grupo Minsa, del tapatío Raymundo Gómez Flores—, quien mantiene una constante interacción con las representaciones empresariales nacionales e internacionales, así como con inversionistas con quienes expresa un discurso mucho más tolerante y promotor al capital privado que el discurso predominante en Palacio Nacional; ello le ha ganado simpatía y reconocimiento…, pero también la duda de si acaso no sucederá lo mismo que con Alfonso Romo Madero y Andrés Manuel López Obrador.
En los corrillos empresariales y de negocios son muy bien recibidos los comentarios que, en corto, hace Gómez Sierra en torno a que, por ejemplo, se liberalizará la política energética desde “el día cero” de la eventual presidenta por Morena y que “Pemex dejará de ser un lastre”, que se tomarán acciones de fondo y frontales para atajar la creciente inseguridad pública o que será “sin cortapisas” el apoyo a la relocalización de cadenas de suministro en México.
Sin embargo, queda la experiencia de lo que sucedió en 2018.
En ese entonces, el empresario regiomontano Alfonso Romo apoyó la campaña presidencial mostrando el lado amable y conciliador de López Obrador, primero como candidato y luego como Presidente electo. El fundador de Vector y Grupo Savia formó una imagen socialdemócrata del Presidente entrante, refrendó un crecimiento económico de 6% y aseguró que el Nuevo Aeropuerto Internacional de México no sería cancelado…, y ése fue el primer revés de muchos otros que le siguieron como Jefe de la Oficina de la Presidencia, donde perdió continuas batallas ante el “ala dura” del morenismo. Incluso se desdibujó su tarea más destacada como buen interlocutor entre Gobierno y grupos de poder económico, el llamado Consejo Asesor Empresarial, que dejó de brillar antes de la primera mitad del sexenio.
Las propuestas y planes que presenta Altagracia Gómez alivian el estrés que en este sexenio acumularon los dueños de la plata…, aunque tienen memoria de lo que se prometió y lo que sucedió.
Pero ante la desorganización que priva en las filas opositoras, donde no es clara ni consistente la representación empresarial de Xóchitl Gálvez, por ahora les resulta más constante la interlocución con el equipo de Sheinbaum.
En esta elección, como en todas, sólo una persona gana.
TelevisaUnivision, a lo local y regional. La novedad es la apuesta que la dupla que encabeza Wade Davis hace por su división noticias N+, a fin de que conquiste nuevas audiencias mediante una estructura de sedes y centros de operación “en tierra” dotados con tecnología de vanguardia. Esto, para generar contenidos de entretenimiento e información de corte local y regional. Con dicha estructura, adaptada a los hábitos de consumo del público, tiene la capacidad de convertir lo local en global… y viceversa.
Y es que el éxito de las grandes televisoras del mundo y las plataformas de streaming radica en muy buena parte en materiales audiovisuales que reflejen la especificidad de los elementos de identidad cultural de las comunidades y de las personas en lo individual, por lo que ninguna historia es pequeña.
La nueva estructura operativa posee doble relevancia, dadas la “madre de todas las elecciones” que habrá en México este 2024, cuando las presiones políticas de toda índole a medios de comunicación y comunicadores estarán al rojo vivo y sea exigencia ciudadana el equilibrio informativo y la objetividad.
Se trata de una prueba de fuego para todos… y para la que N+ se ha pertrechado: por ejemplo, su canal de breaking news Foro TV fue la señal de noticias que captó 33% más de la audiencia y con ello mostró el mercado potencial de productos informativos y/o de entretenimiento de calidad.
Centeno, El Valiente. Muy gallardo y valiente se postea en redes sociales José Antonio Centeno, el fugaz y funesto presidente de la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación, criticando a la actual directiva que encabeza la maestra Esperanza Ortega. Ya ni quien tope a Centeno ni lo tome en serio, pues, hasta el momento, Ortega es candidata de unidad, dado su liderazgo y resultados, para ser reelecta como representante de las Pymes en México.
¿Y los laboristas de ocasión? Con la huelga de Audi, muchos se preguntarán: ¿Dónde están los obradoristas defensores de los derechos laborales como el padre de la hoy secretaria de Gobernación, Arturo Alcalde Justiniani? Pues donde esté la lana, como los 800 millones que pagó el Gobierno por la marca Mexicana de Aviación al Sindicato de Pilotos —liderado por Humberto Gual—, con asesoría del ínclito abogado. Lo curioso es que ese mismo laborista no pudo hacer mucho por los trabajadores de La Jornada en su conflicto contra la empresa Demos, ni por los hoy desempleados de Notimex, a los que también asesoró. Y ni mucho menos por los olvidados empleados de Nafin y Bancomext, cuyos líderes sindicales ni siquiera fueron recibidos por Luisa María Alcalde, quien fue titular de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social.