El 18% de personas entre 3 y 18 años está fuera del sistema educativo

BAJO SOSPECHA

Bibiana Belsasso*Esta columna expresa el punto de vista de su autor, no necesariamente de La Razón. larazondemexico

En México hay más de 6.4 millones de niños y niñas que no asisten a la escuela, la mitad forma parte del grupo de los pequeños más desfavorecidos en el país, muchos son niños y niñas indígenas.

Las cifras oficiales hablan de poco más de millón y medio de menores de edad que no están matriculados en las escuelas. Pero no hay que confundirnos, muchos están matriculados, sus padres cobran los apoyos económicos y becas y los menores no atienden a la escuela.

Esta semana platicamos con Fernanda Domínguez, coordinadora de Educación en el Instituto Mexicano para la Competitividad, Imco, sobre los recientes datos que han obtenido.

Fernanda Domínguez: En términos de deserción escolar es cierto que ha caído la tasa, sobre todo, en los últimos años sí hemos logrado, por lo menos en números, que los jóvenes abandonen en menor medida la escuela.

Ahora, dicho eso, hay algo bien interesante que es importante acotar que es el número de estudiantes que se matricula versus el número de estudiantes que realmente están acudiendo a la escuela, porque hay muchos que quizá administrativamente se matriculan, pero no tienen posibilidades o realmente ya no asisten al curso escolar, porque al final por como se mide el abandono escolar, es que los que entran a un grado ya no regresan al siguiente.

Nosotros estuvimos analizando en enero, en el Día Internacional de la Educación, cuál es el panorama, el 18 por ciento del total de personas entre 3 y 18 años está fuera del sistema educativo, entonces mucho se habla del millón y medio que hoy por hoy están fuera, que es cierto, es un número altísimo, tiene que ver quizá por la pandemia, por muchos motivos, pero la cifra real es tres veces ese número.

BB: ¿Cuáles son los principales motivos?

FD: Varían mucho, por ejemplo, para mujeres, el principal motivo es un tema de embarazo adolescente, o las mujeres se quedan en sus casas a hacer trabajo no remunerado, es decir, labores de cuidado y los hombres abandonan los estudios, por lo general, por entrar al mercado laboral, regularmente informal.

BB: ¿A partir de qué años?

FD: Las tasas de deserción escolar van aumentando conforme aumenta el grado escolar, es mucho mayor la deserción en secundaria y ahí brinca todavía más digamos a la media superior. Donde más perdemos este talento es en media superior y aquí el dato que nosotros manejamos que es muy interesante, es que de cada 100 niños que entran a primaria, solamente 26 logran terminar una licenciatura, es decir, estamos perdiendo 74 por ciento del talento mexicano.

BB: Estamos viendo que la causa número 1 de la deserción es la falta de recursos económicos, muchos de estos menores pueden ser cooptados por el crimen.

FD: La seguridad, sin duda alguna, es un eje fundamental para el análisis de la educación, sobre todo, en zonas más marginadas que quizá no tienen acceso a una educación, pero sí tienen acceso a dinero fácil, como puede ser el narcotráfico, o grupos de delincuencia y crimen organizado, entonces, sin duda es un pilar importantísimo.

Un plantel en Yucatán.
Una escuela en Chilpancingo.

BB: De lo que han estudiado ¿qué es lo que más preocupante, según tú, en torno a la educación en México?

FD: Pues mira, a lo mejor no es algo que suene demasiado atractivo, a mí lo que más me preocupa es que no sepamos cómo están hoy por hoy los jóvenes en México, el aprendizaje, sobre todo, después de una pandemia, Bibiana, tenemos altos números de personas que no están asistiendo a las escuelas y lo podemos ver con las pruebas PISA, que son estas pruebas internacionales de la OCDE, pues dos de cada tres mexicanos no alcanzan el nivel mínimo de conocimientos.

Entonces es muy triste pensar que tengamos que depender de un organismo internacional para conocer cómo está la educación en nuestro país.

BB: ¿Cómo llegan ustedes a la cifra de 6.4 millones que no van a la escuela?

FD: Esta es información del censo nacional que van puerta por puerta para identificar en qué hogares están asistiendo los niños al colegio y de ahí salen estos 6.4 millones que no van a la escuela, aunque estén matriculados.

BB: De acuerdo con el Foro Económico Mundial la desigualdad educativa en México ya ha rebasado el promedio de la región latinoamericana.

FD: Sí, el tema de desigualdad educativa es tristísimo. Podemos hablar de muchos temas, de la desigualdad en la calidad educativa, es decir, cuántos docentes hay por estudiantes, y ahí, México tiene una proporción de demasiados estudiantes por cada docente y esto afecta el tipo o la calidad de educación.

Otro es el acceso a dispositivos electrónicos, que, si bien está comprobado que pueden ser una herramienta de distracción dentro del aula, por supuesto que significan acceso a la información, al conocimiento universal, entonces hay muchos estudiantes que tienen acceso de sobra y hay muchos que no tienen acceso a un dispositivo y no tienen acceso a la conectividad.

Podemos hablar de la desigualdad entre estados, en entidades como Chiapas y Oaxaca, solamente una de cada cuatro escuelas tiene acceso a Internet, comparado con la CDMX o Nuevo León, que están mucho más industrializados y con este tipo de diferencias se empieza a ampliar no sólo el acceso a la educación, sino también la calidad de ese acceso a la educación.

BB: Datos del Imco aseguran que 3 de cada 10 niños que no asisten a la escuela son de lengua indígena.

FD: Es correcto, de esos 6.4 millones que están fuera del sistema educativo, el 37 por ciento, es decir, 3 millones pertenece a un grupo vulnerable y de ahí, 3 de cada 10, la gran mayoría es de lengua indígena, entonces cuando hablamos de grupos vulnerables, pues, por supuesto, que no estamos haciendo el enfoque necesario ni la estrategia necesaria para atender a quien más lo necesita.

BB: Hablamos de Internet, pero muchas escuelas no tienen ni agua potable, ni siquiera baños. ¿Qué es lo que más se necesita para tener una educación digna?

FD: Todo depende en qué escuelas, porque dentro de México hay muchos Méxicos, yo puedo hablar de la importancia de invertir en conectividad, pero quizá haya escuelas, sobre todo, en la zona sur que está mucho menos desarrollada, que me van a decir: “Oye, a mí que me importa tener iPad en el aula cuando ni siquiera tengo acceso a agua potable”.

Entonces, todo depende, por eso es muy importante saber en qué condiciones están las escuelas para identificar muy bien qué se necesita en cada escuela, por eso empezó La Escuela es Nuestra, cambiaron las reglas de operación, le están dando dinero sin ningún tipo de transparencia, no saben en qué están usando ese dinero porque le dicen: “Bueno, los padres de familia ya sabrán en qué invertirlo”, entonces no necesitan dar retroalimentación de en qué lo invirtieron ni mucho menos.

La primera es saber cómo están las escuelas y ya de ahí poder identificar en qué inviertes.

Temas: